Pamplona. El alcalde de Berriozar, Raúl Maiza (EH Bildu), ha declarado este lunes en el juzgado de Instrucción que investiga la denuncia presentada por la Asociación Cultural Doble 12 por colocar por segundo año consecutivo la ikurriña en su localidad, pese a que existía una sentencia en contra.

Los hechos constituirían presuntamente dos delitos, uno de desobediencia a un mandato judicial y otro de prevaricación por omisión, ha señalado en una nota la Asociación denunciante, que indica que un fallo en contra del munícipe -que se presenta a la reelección en mayo- podría acarrear una pena de multa y de inhabilitación para cargo público de entre seis meses y dos años.

El representante de Doble 12, Ricardo Guelbenzu, ha manifestado en una nota que la denuncia se presentó "para que se cumpla la ley, según las sentencias que ya se han dado en el pasado con respecto a la colocación fraudulenta de la ikurriña en instituciones navarras dirigidas actualmente por cargos públicos del cuatripartito".

La Asociación Doble 12, que tiene entre sus fines la defensa de los símbolos de Navarra, confía en el Estado de Derecho y en que la justicia les dé la razón.

Sobre la colocación de la ikurriña, Guelbenzu ha mostrado respeto por las personas "a quienes guste ese símbolo", pero "no en una institución que representa a la ciudadanía. Hay que respetar las instituciones, hay que respetar las reglas del juego para tener una buena convivencia".