pamplonA - El Supremo estudia suspender a los cinco presos soberanistas que consiguieron acta en las pasadas elecciones generales: para el Congreso, Jordi Sànchez, Jordi Turull y Josep Rull, de JxCat, y Oriol Junqueras, de ERC; y para el Senado, el republicano Raül Romeva. Su condición de electos obliga al alto tribunal a repensar las “consecuencias extraprocesales de actos judiciales”, que pasan por darles permiso para tomar posesión de sus cargos y proceder a una posible suspensión de los mismos. Una vez tome conocimiento formal del resultado de los comicios, el TS debe comunicar a las cámaras legislativas su especial situación procesal, lo que podría tener como consecuencia su suspensión en el ejercicio del cargo en aplicación del artículo 384 bis de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, que se aplica a los procesados mientras se encuentran en prisión.

Aunque bien es cierto que la falta de precedentes no permite aventurar a priori ninguna decisión concreta; esto se produciría una vez tomen posesión de sus escaños, el próximo 21 de mayo, fecha de constitución del Congreso y del Senado, donde deberán acudir presencialmente y jurar o prometer su cargo, tras obtener el necesario permiso de la Sala que les está juzgando por rebelión, sedición y malversación de fondos públicos. El Supremo ya justificó el pasado mes de julio la decisión de suspender la actividad parlamentaria de los presos independentistas que habían conseguido escaño en las elecciones al Parlament. Argumentaba, entre otras cuestiones, la “excepcional amenaza” de la presunta rebelión por la que se encontraban procesados. Rechazaba así un recurso presentado por los líderes soberanistas y confirmaba la resolución dictada por el juez instructor, Pablo Llarena.

no hay voto delegado Lo cierto es que si quedaran definitivamente suspendidos, Pedro Sánchez podría ver facilitada su investidura ya que la mayoría absoluta, en vez de estar fijada en 176 escaños, se reduciría a 174. En la Cámara baja no es posible la delegación de voto como sí ocurre en el Parlament, así que tendrían que ser sustituidos por sus respectivas formaciones políticas. En este punto se abre el primer conflicto de esta legislatura. No hay un criterio claro sobre si esa suspensión, decretada por el Supremo, se aplicaría de forma automática o bien los cuatro electos podrían tomar posesión en el Congreso y serían suspendidos después. En verdad, su presencia en el Congreso cinco días antes de las elecciones europeas y municipales supondría un impacto de imagen en pleno tramo final de campaña, sobre todo para Junqueras, que lidera la candidatura de ERC a Estrasburgo.

En todo caso, si finalmente fueran necesarios tan solo 174 diputados, el PSOE de Sánchez vería allanado su escenario ya que con sus 123 escaños podría sumar con Unidas Podemos (42), PNV (6), Compromís (1), el PRC (1) de Miguel Ángel Revilla y los dos diputados de Coalición Canaria alcanzando la cifra de 175 diputados, uno más de los apoyos requeridos bajo estas condiciones.