londres - El exalcalde de Londres Boris Johnson, partidario de que el Reino Unido abandone la Unión Europea (UE) el próximo 31 de octubre con o sin acuerdo, competirá con el ministro de Exteriores, Jeremy Hunt, por suceder a Theresa May como jefe del Gobierno británico.

Johnson se impuso con holgura en la primera fase de las primarias del Partido Conservador, al recibir el apoyo de 160 de los 313 diputados tories, y es el claro favorito en las encuestas para imponerse en la votación por correo entre los 160.000 afiliados conservadores que se iniciará ahora.

Hunt, que también contempla un brexit duro si no logra renegociar con la UE los términos de salida, recibió 77 votos entre sus colegas de bancada, mientras que el ministro de Medioambiente, Michael Gove, quedó eliminado tras sumar 75 apoyos.

A finales de julio, el Partido Conservador anunciará el ganador de sus primarias, que heredará asimismo el despacho del número 10 de Downing Street una vez May consume la dimisión que anunció a finales de mayo.

Boris Johnson fue uno de los principales impulsores de la campaña a favor del brexit antes del referéndum de 2016, pero renunció pocos días después de ese plebiscito a presentarse como candidato a primer ministro, lo que dejó paso a Theresa May.

En esta ocasión, el exalcalde de la capital británica, que disparó su popularidad con la organización de los Juegos Olímpicos de 2012, sí ha dado el paso para dirigir al país en la fase más delicada del brexit y parte con una abrumadora ventaja respecto a Hunt para conseguirlo.

Según un sondeo publicado por la influyente página ConservativeHome a principios de esta semana, cuando todavía quedaban seis aspirantes en la carrera por el liderazgo, el 54,8% de las bases del partido le prefieren a él como líder, mientras que el 5,8% optaría por su rival.

campaña discreta Johnson comenzó a hacer una discreta campaña entre sus compañeros de bancada ya hace meses, cuando la posibilidad de que May acabara dimitiendo comenzaba a ser un rumor constante en Westminster.

Algunos tories expresaban entonces dudas sobre la idoneidad de Johnson como líder, en parte debido a su peculiar carácter y su facilidad para provocar polémicas, pero la desconfianza ha quedado disipada con el amplio apoyo que ha recibido en la primera fase de las primarias.

Para asegurarse de que no alimentaba ninguna controversia inoportuna, BoJo, como se le conoce informalmente en los corrillos parlamentarios, ha mantenido un perfil especialmente bajo en las últimas semanas, con contadas apariciones públicas.

La mayoría de sus aportaciones al debate sobre el brexit han llegado a través de su columna semanal en el diario conservador The Telegraph, del que cobra un sueldo de 275.000 libras anuales (308.000 euros).

Mientras los otros nueve candidatos a las primarias conservadoras se prodigaban en actos y entrevistas, Johnson se ha limitado a un puñado de encuentros con los medios de comunicación: dos entrevistas a diarios afines, un debate televisado por la BBC y el discurso de presentación de su campaña.

En esas ocasiones ha subrayado que su principal objetivo como jefe de Gobierno será sacar al Reino Unido de la UE el 31 de octubre -la fecha límite que se ha marcado desde Bruselas-, dado que cree que otro retraso minaría la confianza de los votantes conservadores.

La presión sobre los tories en ese terreno ha aumentado después de las elecciones al Parlamento Europeo de mayo, en las que el Partido del Brexit, liderado por el eurófobo Nigel Farage, obtuviese el 31,6% de los votos, y los conservadores quedaran relegados al quinto puesto, con el 9,1%.

la polémica salvaguarda Antes que materializar un divorcio abrupto, Johnson asegura que intentará renegociar el acuerdo del brexit al que llegó May con Bruselas, aunque la UE ha advertido hasta ahora de que no modificará los términos de salida ya pactados.

En particular, el exalcalde quiere retirar del texto la polémica cláusula de salvaguarda para evitar una frontera en Irlanda del Norte, el pasaje más controvertido del acuerdo, que llevó a la Cámara de los Comunes a tumbarlo en tres ocasiones.

Johnson ha sugerido que buscará “incentivos” para que Bruselas se avenga a negociar lo que no ha aceptado hasta ahora, entre ellos la retención de la factura de salida de la UE, de unos 39.000 millones de libras (44.000 millones de euros), hasta que consiga obtener nuevas concesiones.

El otro candidato, Jeremy Hunt, aspira por su parte a suavizar los términos de la cláusula norirlandesa y asegura de que algunos líderes europeos están dispuestos a ser más flexibles en ese terreno de lo que han mostrado hasta ahora.

Al contrario que Johnson, el jefe de la diplomacia británica pediría una extensión del plazo de salida si el 31 de octubre no se ha ratificado un acuerdo, aunque asegura que un brexit duro seguirá estando sobre la mesa si él es el próximo primer ministro. - Efe

El político conservador que suceda al frente del Gobierno británico a Theresa May a finales de julio tomará las riendas del complejo proceso de salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE).

Estas son las principales ideas sobre el brexit que mantienen los dos candidatos tories a heredar el despacho del número 10 de Downing Street, el exalcalde de Londres Boris Johnson y el ministro de Exteriores, Jeremy Hunt.

¿QUÉ ESPERAN NEGOCIAR CON LA UE?

Johnson: Quiere eliminar la polémica cláusula de salvaguarda para Irlanda del Norte del acuerdo de salida y aplazar la negociación sobre el estatus de la frontera del Ulster hasta después del brexit.

Sugiere que no pagará la factura de salida de la UE -unos 39.000 millones de libras o 44.000 millones de euros- si no logra mejores términos de salida.

Hunt: Quiere suavizar los términos de la cláusula norirlandesa para intentar que el Parlamento ratifique el acuerdo del brexit, que ya ha rechazado en tres ocasiones. Cree que hay líderes europeos dispuestos a mostrar más flexibilidad que hasta ahora en ese terreno.

¿CUÁNDO PLANEAN QUE EL REINO UNIDO ABANDONE LA UE?

Johnson: Asegura que el brexit se materializará el 31 de octubre -la fecha límite establecida por Bruselas-, con o sin acuerdo.

Hunt: Aspira a aprobar un acuerdo en la Cámara de los Comunes antes del 31 de octubre, aunque advierte de que no ejecutará un brexit abrupto en esa fecha si para entonces no lo ha logrado y pedirá una extensión.

¿CUÁL ES SU PLAN DE CONTINGENCIA SI NO LOGRA UN NUEVO ACUERDO?

Johnson: “No estoy haciendo planes para el fracaso. Debemos cumplir con los deseos democráticos de los británicos”, ha indicado el exalcalde.

Hunt: “Siempre he creído que si el único modo de consumar el brexit es hacerlo sin un acuerdo, entonces eso es lo que haré”, sostiene el ministro de Exteriores.

¿PREVÉ CONVOCAR UN NUEVO REFERÉNDUM O UNAS ELECCIONES?

Johnson: Ninguna de las dos. Considera que los británicos no quieren que la clase política les “fuerce a votar” otra vez. Subraya que mientras él sea primer ministro no se convocará otro plebiscito.

Hunt: Está en contra de un segundo referéndum, aunque si lo hubiera votaría por abandonar la UE -en 2016 votó por la permanencia-. Advierte de que unas elecciones podrían precipitar que el líder laborista, Jeremy Corbyn, llegara al poder.