Pamplona - La repetición electoral en España es “frívola” y es “irresponsable”. No oculta Uxue Barkos su malestar por la nueva llamada a las urnas tras la frustrada negociación entre el PSOE y Podemos, y así lo expuso ayer en el acto con el que Geroa Bai dio inicio formal al curso político. Donde alertó de la “frustración” que la situación política está generando en la ciudadanía, y donde puso en valor la capacidad de su formación para pactar y llegar a acuerdos con otras fuerzas políticas.

“La diferencia entre la situación política española y la de Navarra se llama Geroa Bai”, apuntó Barkos, para quien unas nuevas elecciones “no van a resolver lo que no han sabido desatascar quienes no han sabido negociar”. “Negociar es ceder. Es saber ganar y saber perder. Y es entender que quien tienes en frente tiene que tener también una satisfacción por el acuerdo alcanzado”, argumentó

Han pasado casi cuatro meses desde las elecciones del 26 de mayo, y tanto Geroa Bai como su principal referente político se han adaptado a su nueva situación. Ya sin el liderazgo del Gobierno de Navarra, pero con un papel protagonista en el Ejecutivo y pieza clave para la búsqueda de mayorías en el Parlamento foral, donde EH Bildu se vislumbra como socio preferente, casi único vista la oposición que ha asumido la coalición derechista Navarra Suma.

Un papel central que la formación defendió ayer como clave para garantizar la estabilidad, y que evidenció con el orgullo de quien se siente determinante para cualquier acuerdo progresista y plural en Navarra. Así que no es casual que todos los oradores en el acto de ayer de Barkos al presidente del Parlamento, Unai Hualde; del vicepresidente José Mari Aierdi a los alcaldes de Zizur y Altsasu, Jon Gondan y Javi Ollo, apuntaran en la misma dirección.

Una línea argumental en la que incidió de forma clara Barkos, que admitió que la noche electoral “no fue fácil para Geroa Bai”. Pese a unos “magníficos resultados” la formación vasquista perdió el liderazgo de la mayoría progresista en detrimento del PSN, lo que sin embargo no ha impedido que “rápidamente” hicieran una “lectura nítida” del resultado electoral y durante estos cuatro meses hayan sabido “recorrer el camino en favor de una sociedad plural y un Gobierno estable”. “Esa es otra manera de hacer política”, defendió.

Barkos celebró así que en Navarra la “política de los quesitos”, la que garantizaba a la derecha el Gobierno de la comunidad a partir de la exclusión de una parte de la sociedad “se ha roto”. “Hemos sabido ceder. Ceder para ganar para el conjunto de la sociedad. Desde la generosidad y desde el realismo de nuestras propuestas”, argumentó la líder de la formación, que destacó que Geroa Bai ha actuado con “realismo” y con “eficacia” en los procesos de formación de las instituciones tras los comicios de mayo.

Se mostró así satisfecha con el papel que su formación ha asumido en el nuevo Gobierno, donde gestionan cuatro consejerías vinculadas al desarrollo social, económico y territorial de la comunidad. “No hemos buscado un Gobierno de cuotas. No lo hicimos en 2015 y no lo hemos hecho ahora. Pero sí hemos ambicionado responsabilidades que nos van permitir influir de forma más directa en la construcción de la Navarra del futuro”, defendió Barkos, que advirtió de que van a ser “muy exigentes” en que se mantenga “el orden y el rigor” en la gestión de la Administración pública de los últimos cuatro años.

Confianza en el PSN Ante cerca de 250 militantes y cargos públicos de la formación, Barkos abogó por “seguir construyendo una sociedad en positivo”, destacando “lo que nos enriquece y lo que nos da valor”. Una actitud que contrapuso con la de Navarra Suma, quien vaticinó va a pasar de ser una coalición “tricefálica” a una “trifalea”, por el “dolor de cabeza” que les va a suponer la cohabitación interna a las tres fuerzas de derechas.

En cambio, quiso poner en valor la actitud que el PSN está tomando en esta nueva legislatura. Barkos se mostró compresiva y empática con la formación de María Chivite, a quien agradeció que esta semana se sumara en el Parlamento a quienes defienden el euskera como “un elemento de cohesión” dejando en soledad a quienes lo utilizan como confrontación partidista. “La negociación del Gobierno tenía sus aristas. Pero también para el PSN, que sufre ataques severos e inaceptables que también debemos contener. Y que nos deben hacer entender la fortaleza que algunos hombres y mujeres del PSN han mantenido durante el proceso de negociación”, apuntó.

Además de la presencia en el Gobierno, el acuerdo alcanzado con los socialistas ha permitido a Geroa Bai asumir la presidencia del Parlamento, y hacerlo además en una Mesa que represente a la “pluralidad de Navarra”. Un detalle que Barkos quiso señalar ayer, recordando que su grupo político fue capaz de “arriesgar” para que EH Bildu tuviera también una representación en el órgano rector del Parlamento. Y que aprovechó para reprochar a la formación abertzale que ahora no quiera apoyar a Geroa Bai en la elección del senador autonómico. Cargo al que opta Koldo Martínez y que, dijo, garantizará la presencia en Madrid de una voz “que va a defender a Navarra, a sus instituciones y a su pluralidad”.