BILBAO - El PNV denunció ayer que las que las filtraciones por episodios de la sentencia del procés en distintos medios de comunicación evidencia que durante la causa del 1-O “no se han respetado” las debidas garantías de los procesados y cuestionan la “credibilidad” de la Justicia en un caso histórico. Así se pronunció el presidente del EBB, Andoni Ortuzar, en su visita a la localidad alavesa de Pobes, mostrándose muy crítico con que el juez Manuel Marchena no haya sido capaz de echar el candado al fallo judicial hasta el día de su publicación, previsiblemente hoy, por mucho que el magistrado señalara estar “disgustado” por la aparición troceada del dictamen.

El líder jeltzale consideró “lamentable” que una resolución de estas características “esté sometida a filtraciones”. “La Justicia, en un sistema democrático, es ante todo garantías; y con este tipo de filtraciones, esas garantías no se cumplen, y la Justicia empieza a tener problemas para ser creíble”, reprochó Ortuzar, quien aseguró no haber entendido nunca que este juicio se haya llegado a celebrar, en tanto que lo que acontece en Catalunya es “un problema político” cuya salida “no vendrá” de sentencias judiciales ni de la aplicación del artículo 155 de la Constitución, como pretende la derecha, para volver a intervenir el autogobierno catalán.

Ortuzar reincidió en que la vía de escape del choque de trenes entre Catalunya y el Estado español, “un problema político”, debe buscarse a través de “un diálogo abierto y constructivo”, y de una negociación “que desemboque en acuerdos políticos que satisfagan a una mayoría de la sociedad catalana”. “Nunca creímos que este juicio fuera ni justo ni necesario”, denunció en presidente del EBB, quien lamentó que lo ocurrido con este proceso judicial evidencia que el modelo de Estado en España “se asienta sobre la existencia de una única nación” y sobre “la negación de otras naciones”, como son, según Ortuzar, la vasca y la catalana.

Y es que el problema catalán no escapa del contexto del modelo identitario que prevalece en España, con el ejemplo de las celebraciones del 12-O, donde, para el jeltzale, se comprobó que “el modelo de Estado que se vio en Madrid no es el nuestro y no nos gusta”.

Ortuzar cree que “es posible” avanzar hacia otro modelo de Estado, en el que se asumiera que en su seno que existen “diferentes naciones que tienen que convivir” y que, a través del diálogo, han de ser capaces de “asentar una convivencia en condiciones de igualdad y bilateralidad”. El líder del PNV precisó que aunque “casi nadie” hablará de este asunto en la campaña para las elecciones generales del 10-N, su formación hará un “esfuerzo” para introducir este asunto en la agenda política.

para bildu, una “tropelía” En este contexto electoral, el candidato de EH Bildu al Congreso por Gipuzkoa Jon Iñarritu afirmó desde Pasaia que la “mejor respuesta” a la sentencia del procés y a la del caso Altsasu, que calificó de “tropelías”, es votar a la coalición soberanista. En cuanto a la decisión del Tribunal Supremo, criticó que “gotita a gotita se está filtrando la sentencia”. “Estas personas nunca debieron ser juzgadas”, destacó el candidato de EH Bildu, para quien de manera “única en Europa todo un gobierno legítimo y democrático va a ser condenado”. “Frente a tanta injusticia, represión y criminalización creemos que la mejor respuesta que se pueda dar es votar abertzale, independencia e izquierda porque es un voto que no gusta a Madrid”, demandó.

EH Bildu enviará una delegación a Catalunya, en cuanto se conozca oficialmente la sentencia, para participar en las movilizaciones de protesta que se convoquen. De igual forma, la coalición soberanista estará presente en aquellas otras que se desarrollen en la CAV y en Nafarroa en los próximos días y semanas.