pamplona - La ronda de contactos del presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, con partidos y dirigentes autonómicos ha sido criticada por la oposición, al considerar que se trata de un intento del candidato socialista de “blanquear” sus contactos con el presidente catalán, Quim Torra. Torra será el segundo, después del lehendakari vasco, Iñigo Urkullu, en esa ronda de llamadas a los presidentes autonómicos, de acuerdo con el orden de antigüedad estatutaria que Sánchez ha anunciado que va a seguir para esos contactos. El presidente explicó que quiere hablar con ellos para trasladarles la “urgencia” de poner en marcha el Gobierno y “salir de este impasse de estar en funciones”.

Así lo dijo antes de participar en la reunión del Consejo Europeo en Bruselas, donde dejó claro que el orden de llamadas será el que “viene marcado por el protocolo” y no por él, y después de que la portavoz del Govern, Meritxell Budó, considerase que “sería un gesto” de su parte llamar primero a Torra. La portavoz avisó de que “el tema no se soluciona con una llamada dentro de la ronda de los presidentes”. “Reclamamos respeto institucional y, por tanto, pedimos que se aborde el diálogo entre gobiernos desde una bilateralidad, es decir, que se reconozca la bilateralidad entre Catalunya y el resto del Estado”, argumentó.

Saltarse el protocolo y telefonear primero a Torra no hubiera supuesto una gran transgresión, pero el candidato socialista ha preferido no hacerlo dentro de su estrategia para no dar atisbos de bilateralidad al Govern. El entorno del president y los cargos de JxCat, que están instalados en el rechazo a su investidura con una posición más dura que ERC, le habían pedido que, al menos, llamara antes a Torra porque, por lo demás, esta ronda les parece un movimiento insuficiente que diluye al president en un café para todos.

Sánchez, que se encontró ayer con una entrevista de Marta Vilalta en Nació Digital donde asegura que la llamada a Torra era una petición de ERC, justificó la ronda en que a los presidentes autonómicos les conviene un Gobierno cuanto antes para hablar de financiación, trenes de cercanías, otras infraestructuras y sanidad. Son temas relevantes para Catalunya y tocan algunas de sus demandas históricas, pero no colman las aspiraciones de los soberanistas, que piden una mesa entre gobiernos sin vetos, para hablar del derecho de autodeterminación o el fin de la represión. Que la ronda de Sánchez se haya recibido con tanta frialdad en JxCat añade también presión a ERC, que confiaba en que este movimiento justificara ante sus socios las conversaciones con el PSOE.

Pero antes de esa ronda, Sánchez se verá, ya el próximo lunes por la mañana, con el líder de la oposición y del PP, Pablo Casado, y con la portavoz de Ciudadanos, Inés Arrimadas. Casado ya adelantó el miércoles, tras la ronda de consultas con el rey, que mantiene su negativa a apoyar la investidura de Sánchez y planteó que pueda ser Ciudadanos el que se abstenga, junto con Navarra Suma (UPN), para facilitarla. Es una sugerencia que ayer volvió a plantear antes de participar en la reunión del Partido Popular Europeo, también en Bruselas, donde afirmó que “un voto afirmativo del PSOE, Podemos y los partidos regionalistas y la abstención de Cs permitiría una investidura sin depender de ERC”.

Casado criticó además el hecho de que Sánchez haya incluido a Torra en su ronda de conversaciones y le acusó de usar de “comparsas” al resto de presidentes. “(Sánchez) intentó convertir en comparsas a los presidentes autonómicos y a algún responsable municipal para vestir algo que sigue quedando al desnudo, y es que se ha comprometido con los independentistas catalanes en volver a recuperar una bilateralidad y un reconocimiento institucional que le obliga a recibir a Torra otra vez en la Moncloa”, dijo.

Es un argumento que también esgrimió el presidente andaluz, Juanma Moreno, al afirmar que no le gustaría que el candidato socialista intentara “utilizar a las comunidades para blanquear la negociación”. “Si él quiere establecer un diálogo y una negociación con el señor Torra, que quiere la independencia de Cataluña y romper España, no puede utilizar al resto de comunidades autónomas, y menos a los andaluces”, recalcó. Tampoco el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, quiere ser la “coartada” para que el candidato “hable y restituya” su relación con Torra.

gesto De momento, a lo que se ha comprometido Sánchez es a una llamada a los responsables autonómicos, un gesto que a Torra no le parece suficiente para solucionar el conflicto en Catalunya. Por ello, lanzó un mensaje a Sánchez para pedirle que encare esta situación con “valentía” y no con gestos “vacíos y estériles”, según fuentes de su entorno.

En principio, Sánchez le llamará, al igual que a los otros 16 presidentes regionales y se verá con Casado y Arrimadas. El resto de contactos, los encabezará la portavoz parlamentaria socialista Adriana Lastra, en una ronda en la que se ha incluido a Vox. Sin embargo, el líder del partido, Santiago Abascal, avanzó ayer que no está dispuesto a sentarse con el PSOE a hablar de investidura mientras los socialistas sigan negociando con “los enemigos de España”. “No vamos a contribuir al blanqueamiento de Bildu, ni del comunismo bolivariano ni del golpismo”, escribió Abascal en un tuit.

Su versión difiere de la del secretario general del partido, Javier Ortega Smith, quien consideró “lógico” y “correcto” que se les llame para participar en esa ronda, aunque no vayan a apoyar la investidura de Sánchez. - D.N.

El Post-it

Iceta será ratificado en el Congreso del PSC. El líder del PSC, Miquel Iceta, propondrá que la alcaldesa de L’Hospitalet de Llobregat, Núria Marín; la portavoz parlamentaria, Eva Granados, y el actual secretario de organización, Salvador Illa, le acompañen en el núcleo duro de la nueva ejecutiva del PSC que saldrá del XIV Congreso. Los socialistas catalanes ratificarán la reelección del actual primer secretario en el transcurso del cónclave, que se celebrará el fin de semana.