pamplona - Por la mínima y tras ochos de meses de bloqueo, Pedro Sánchez logró ayer el primer Gobierno de coalición de la democracia. El líder del PSOE fue elegido presidente del Gobierno con la mayoría simple del Congreso, con sólo dos votos más a favor que en contra, y se prepara ahora para formar el primer gobierno de coalición de la democracia. Pese a los nervios de última hora, no hubo sorpresas y la investidura de Sánchez salió adelante en esta segunda votación en la que el candidato socialista sumó 167 síes -PSOE, Unidas Podemos, PNV, Más País, Compromís, NC, Teruel Existe y BNG- frente a 165 votos en contra -PP, Vox, Cs, JxCat, UPN, CUP, PRC, Foro y CC- y las 18 abstenciones de ERC y EH Bildu.

La bancada socialista y la de Podemos se ponían en pie para aplaudir al nuevo presidente en cuanto la presidenta de la Cámara, Meritxell Batet, leía este resultado ajustado que hace a Sánchez presidente por la vía ordinaria, ya que su llegada a La Moncloa, año y medio atrás, fue con una moción de censura. Con gritos de “presidente, presidente” de los socialistas y de “sí se puede” de la bancada de Unidas Podemos, los diputados de los dos partidos que van a conformar la coalición expresaban su alegría.

Por la tarde, Batet acudió al Palacio de la Zarzuela para informar al Rey de la investidura de Sánchez, que prometerá hoy su cargo ante el monarca. No obstante y pese a lo que fuentes del Gobierno había avanzado inicialmente en los últimos días, habrá que esperar hasta la semana que viene para conocer en profundidad al nuevo Ejecutivo, ya con Unidas Podemos en el gabinete.

Más allá de los detalles del nuevo Consejo de Ministros, en su última intervención en el debate antes de ser elegido, Sánchez lamentaba el bloqueo político que ha vivido el país durante meses y prometía promover cambios legales que impidan que vuelva a repetirse una situación como ésta. Por eso apostó por encontrar “fórmulas para facilitar en el futuro la formación de mayorías de Gobierno frente a las mayorías de bloqueo”.

“Sin parlamento no puede haber un gobierno democrático pero sin gobierno electo tampoco un parlamento” que funcione, y sin ambas cosas “el sistema se resiente”, añadió Sánchez, quien también lanzó duros reproches a la derecha por su comportamiento de estos días. Así, acusó a los partidos de la derecha de “haber tensionado” en los últimos días “para ver si por algún lado aparecía una nueva oportunidad” que impidiera su investidura. “Pues no ha funcionado”, concluyó sobre la campaña de acoso a los diputados votantes de Pedro Sánchez. Y les advirtió de que tienen dos opciones, o “seguir en el berrinche o aceptar el resultado” electoral. “Les recomiendo que acepten lo segundo”, les emplazó. “Esta Cámara no es suya”, recordó Sánchez a los partidos de la oposición al final de este debate de tres días que ha tenido durísimos momentos de tensión, especialmente el domingo cuando PP, Vox y Ciudadanos arremetieron contra Bildu por sus críticas al rey.

Su socio de coalición y futuro vicepresidente, Pablo Iglesias, mandaba un consejo a Sánchez, que frente a los “intolerantes” y los “provocadores”, los que quieren “llevar a España al pasado”, el presidente tenga “el mejor tono y la mayor firmeza democrática”. Además, frente a los ataques de PP y Vox, Iglesias acusó a los líderes de estos partidos, Pablo Casado y Santiago Abascal, de convertirse en “la mayor amenaza contra la monarquía en España”. “Si algo sabía Juan Carlos I, que venía de donde venía y que fue rey por lo que fue rey, es que solamente alejándose de la derecha la institución podría pervivir”, dijo Iglesias.

No hubo en esta última sesión tanta tensión como en las dos anteriores, y sí momentos muy emotivos como cuando la diputada de En Comú Podem Aina Vidal, que faltó los dos primeros días del debate por el cáncer que padece, ha recibido el aplauso de la mayoría de la Cámara tras escuchar el agradecimiento de Pablo Iglesias por acudir a votar.

Y aunque no imperó la crispación como el sábado y el domingo, se mantuvieron los mismos reproches entre los partidarios y los detractores de la investidura. Así, el líder del PP, Pablo Casado, acusó a Sánchez de “cambiar el régimen” de la Constitución de 1978 con tal de mantenerse en el poder y de haber dejado el futuro de España en manos de sus dos “grandes enemigos: los golpistas y los independentistas”. “Su única patria es usted”, espetó Casado a Sánchez, al que incluso llamó “ultra”. Desde Vox, Santiago Abascal insistió en que el Gobierno que va a presidir Sánchez es “ilegítimo” , mientras que la portavoz de Ciudadanos, Inés Arrimadas, acusaba a Sánchez de comenzar a gobernar con “temeridad y mentira”.

Pero las palabras más sorprendentes de la oposición no llegaron ayer desde la oposición, sino desde uno de los grupos que ha hecho posible la investidura, ERC. “Me importa un comino la gobernabilidad de España”, dijo la diputada de Esquerra Montserrat Bassa, hermana de la exconsejera de la Generalitat Dolors Bassa, una de las encarceladas por el procés. La parlamentaria volvió a reclamar la libertad de todos los “presos políticos” y advertía de que ella votaría no, pero se abstenía, como el resto de ERC, para favorecer el diálogo.

Antes de comenzar la votación, la portavoz socialista, Adriana Lastra, criticó el “matonismo” de la oposición. Lastra había anunciado a primera hora que el PSOE piensa acudir a los tribunales por las amenazas y coacciones a sus diputados socialistas para que no apoyaran la investidura. - D.N.

Protección para teruel existe

Guitarte durmió fuera de casa. El diputado de Teruel Existe, Tomás Guitarte, cuenta ya con medidas de protección tras haber recibido amenazas desde que anunció su voto favorable a la investidura de Pedro Sánchez. Así lo confirmaron fuentes del Ministerio del Interior, que como ha hecho con otros diputados, ha evaluado las amenazas que ha recibido y en función de ese análisis se le han puesto medidas de protección. Por razones de seguridad no concretaron qué tipo de medidas. Guitarte desveló que la noche de Reyes tuvo que dormir fuera de su domicilio, en Teruel, por seguridad y a recomendación del servicio de contravigilancia del Congreso.

Siete presidentes

Adolfo Suárez (1979-1981). En la primera legislatura, las negociaciones para la investidura duraron apenas tres días desde que Adolfo Suárez recibió el encargo del rey. El resultado de la votación fue de 183 votos a favor (UCD, Coordinación Democrática, Partido Socialista Andaluz, Partido Aragonés Regionalista y UPN), 149 en contra (PSOE, PCE, PNV, EE, ERC, UN y UPC) y 8 abstenciones (CIU).

Leopoldo Calvo Sotelo (1981-1982). Las negociaciones duraron nueve días de febrero de 1981. La votación -interrumpida por el intento de Golpe de Estado del 23-F- fue de 186 votos a favor (UCD, Coalición Democrática, CiU), 158 votos en contra (PSOE, PCE, PNV, PSA y 7 del Grupo Mixto) y ninguna abstención.

Felipe González (1982-1996). Las negociaciones en su primera legislatura -con una amplia mayoría absoluta- duraron cinco días. Logró 207 votos a favor (PSOE, PCE, EE y CDS), 116 en contra (AP y UCD) y 21 abstenciones (CiU, PNV y Esquerra Republicana de Cataluña -ERC-). En su segunda legislatura, necesitó seis días. Fue elegido con 184 votos a favor (PSOE), seis abstenciones (PNV) y 144 votos en contra (Coalición Popular, CDS, CiU, IU y el Grupo Mixto). Las negociaciones para conseguir su tercer mandato se alargaron durante nueve días. En esta ocasión votaron a favor 176 diputados (PSOE y AIC), 164 en contra (PP, CiU, IU, CDS, EE, EA, UV y PA) y seis se abstuvieron (5 del PNV y 1 del PAR). La última legislatura de González en el poder tuvo como prólogo unas negociaciones de cinco días. Resultó elegido con los votos del PSOE (159), de CiU (17) y PNV (5); 165 votaron en contra (141 del PP, 17 de IU, 4 de CC y 1 de ERC, EA y UV) y 1 abstención (PAR).

José María Aznar (1996-2004). Las negociaciones del acuerdo de legislatura duraron 21 días ante la falta de mayoría absoluta. Fue elegido presidente con los votos favorables del PP (156), de CiU (16), del PNV (5) y de Coalición Canaria (4). Las negociaciones para su segunda investidura -ya con amplia mayoría- se prolongaron durante trece días. Resultó elegido con 202 votos a favor del PP, CiU (15 escaños) y Coalición Canaria (4). Se opusieron 148 parlamentarios, PSOE, IU, PNV y el Grupo Mixto.

José Luis Rodríguez Zapatero (2004-2011). Zapatero necesitó ocho días para ser investido por primera vez. Fue elegido por 183 votos a favor (PSOE, ERC, IU, CC, BNG y CHA). Votaron en contra los 148 diputados del PP y se abstuvieron CIU, PNV, EA y Nafarroa-Bai. En su segundo mandato, necesitó seis días tras ser propuesto por el rey Juan Carlos el 4 de abril de 2008 hasta su presentación en las Cortes el 10 de abril. Fue investido presidente con mayoría simple al contar sólo con los votos a favor de los 168 diputados de su partido. Otros 158 votaron en contra (PP, ERC y UPyD) y 23 se abstuvieron (CiU, PNV, el BNG, IU, ICV y Nafarroa Bai).

Mariano Rajoy (2011-2015). Las negociaciones para lograr su investidura -con mayoría absoluta- duraron tres días. El resultado fue de 187 votos a favor (PP, UPN y Foro Asturias), 149 en contra (PSOE, CiU, IU-ICV, UPyD y la mayoría del grupo mixto) y 14 abstenciones (PNV y CC y Amaiur).

Pedro Sánchez (2016). Las negociaciones para buscar los apoyos duraron 27 días, tiempo que no fue suficiente para reunirlos.

Mariano Rajoy (septiembre y octubre 2016). La investidura necesitó de dos intentos. En la segunda las negociaciones fueron de 5 días que acabaron con la investidura de Rajoy por 170 votos a favor (PP, Cs, CC, UPN y Foro Asturias), 111 en contra y 68 abstenciones de diputados del PSOE, 15 de los cuales desobedecieron la disciplina de voto y se opusieron a la investidura del candidato del PP.

Pedro Sánchez (junio de 2018). Fue el primer presidente del Gobierno en acceder al cargo gracias a una moción de censura contra Rajoy.