- El Banco de España dio ayer una de las pocas noticias fiscales positivas en plena crisis del coronavirus.

En un año en el que el Estado registró un incremento generalizado de la deuda pública -si bien al menor ritmo desde 2012-, Navarra cerró 2019 como uno de los cinco territorios -junto con Baleares, Catalunya, Galicia y la CAV- que consiguió acabar el ejercicio con menos endeudamiento, y sigue siendo una de las comunidades con menor tasa del Estado, solo por detrás de la CAV, Canarias y Madrid. Unas cifras que emanan del último informe correspondiente al pasado año, y que reflejan, poco a poco, una tendencia a la baja que coincide, además, con una serie de años en los que los Presupuestos han consignado una mayor inversión, prueba de que las cuentas públicas navarras empiezan a sanearse después de la grave crisis financiera de la última década.

Un escenario que, siendo optimista, permitirá afrontar mejor la crisis económica que ya está generando el impacto del coronavirus.

Las cifras permiten ver una buena trayectoria. Navarra registra, al cierre de 2019, 3.297 millones de deuda, lo que suponen aproximadamente el 15,7% del PIB navarro. Es la cifra más baja desde el año 2014 (3.197), último año de una legislatura caracterizada por los recortes. A partir de ese año, y hasta que se estabilizaron las cuentas -en parte por la reforma fiscal y en parte por la buena marcha general de la economía-, la cifra de deuda fue aumentando. Pero para finales de la legislatura pasada -ya en el año 2018- se ve una tendencia a la baja que coincide con la capacidad de Navarra para aumentar la inversión pública y a la vez ir amortizando deuda.

El porcentaje que da el Banco de España es revelador. En el segundo trimestre de 2018 se toca techo con el 18,8% de deuda (3.743 millones), y a partir de ahí el porcentaje cae, a veces bruscamente, de trimestre en trimestre. Ese mismo año, por ejemplo, ya se cierra al 17% de endeudamiento. Y 2019 es ya un camino cuesta abajo -con un ligero repecho en el segundo trimestre- hasta el 15,7% de hoy. Cifras, en cualquier caso, menores a los objetivos fijados por Madrid, ya que el cumplimiento cada año del marco de estabilidad presupuestaria ha sido una constante en Navarra. Nunca está de más recordar, para entender la magnitud de la crisis de 2008, que hasta 2009 la deuda ofrecía un porcentaje que hoy se vería como residual y que no llegaba al 5%.

Hay un parámetro curioso en los gráficos del Banco de España. Tiene que ver con el porcentaje de deuda contraída con el Fondo de Financiación a Comunidades Autónomas -conocido como FLA, Fondo de Liquidez Autonómica-, pensado en plena crisis para que las comunidades autónomas pudiese financiar deuda a través del Estado, y no tener que acudir por ellas mismas a los mercados, donde las condiciones podían ser menos ventajosas. Navarra es una de las dos únicas regiones que no tienen ningún dinero comprometido con el FLA. La otra es la CAV. Tiene que ver, por su puesto, la gran autonomía financiera de ambos territorios. Pero hay que tener en cuenta que Navarra aporta, vía Convenio, al sostenimiento de ese fondo, además de que la calificación crediticia de Navarra para financiarse en el exterior ha sido de las más altas del Estado. Por contra, y a diferencia de la CAV, Navarra sí que tiene 299 millones de deuda en lo que el Banco de España denomina "Asociaciones público-privadas".

La situación es buena si se compara con otros territorios. Al margen de la CAV, Canarias y Madrid, las comunidades con mayor porcentaje de deuda sobre su PIB son la Comunitat Valenciana (42,1%), Castilla-La Mancha (34,9%) y Catalunya (33,4%), que es el territorio con más deuda contraída con el FLA (casi 60.000 millones).

De estas comunidades, Valencia logró reducir su nivel de deuda tres décimas de su PIB respecto al ratio de 2018, mientras que Castilla-La Mancha la aumentó en esa misma cifra y Cataluña la subió 1 punto más.

El haber cerrado el año sin aumento en el endeudamiento hace que Navarra sea, un año más, una de las comunidades que cumple con el objetivo de déficit, junto con la CAV y Canarias. El Gobierno foral fue uno de los tres que cerró 2019 superávit, en este caso de 101 millones, después de pagar los 73 millones por el grado a los interinos. Andalucía, Madrid y Galicia también cumplen con el objetivo de déficit, que en términos generales ha sufrido un desvío sustancial, como no se veía desde 2012, y que sitúa el porcentaje en el 2,64% del PIB, lejos del 2% fijado para este año.

15,7 %

Porcentaje de deuda sobre el PIB navarro al cierre del año 2019. Es el cuarto más bajo del Estado después de la CAV (12,6%), Canarias y Madrid (ambas con el 14%).

95,5%

Del PIB del Estado es lo que representa la deuda del conjunto de las Administraciones Públicas al cierre del año 2019.

2,64%

Es la cifra de desvío de déficit del conjunto del Estado en 2019, limitado al 2%. Navarra es de las pocas con superávit (junto con la CAV y Canarias) y Madrid, Galicia y Andalucía también cumplen.