- Arnaldo Otegi desvincula por completo a EH Bildu de la sucesión de ataques a sedes de partidos, especialmente batzokis y casas del pueblo, acciones que considera que perjudican particularmente a la coalición soberanista.

Por empezar por lo último. ¿Cómo justifica la postura de EH Bildu -abstención- en la petición de prórroga del estado de alarma?

-Nosotros hemos mantenido una posición coherente desde el principio. Hemos sido muy críticos con el Gobierno Sánchez en el sentido de que utilizó el estado de alarma en sus inicios para aplicar un 155 camuflado, y ahora lo lógico es que se agote esa situación.

¿Esta vez no han mantenido ningún contacto con el PSOE?

-Mantenemos relaciones habituales como grupo parlamentario con el PSOE. Es algo que forma parte de la normalidad en el Congreso. Formamos parte de lo que se llamó bloque de la investidura gracias a nuestra abstención. Desde el inicio ya lo dijimos y se lo repetimos a Sánchez. Si quiere hacer una política progresista, si quiere abordar el problema identitario y si quiere llevar a cabo una política penitenciaria ordinaria y no excepcional, podemos hacer el camino juntos. Si quiere hacer pactos con Ciudadanos y PP, ahí no vamos a estar.

¿Está vigente lo firmado con Adriana Lastra y Pablo Echenique? ¿Se mantiene la derogación íntegra de la reforma laboral del PP?

-Sigue vigente en la medida que está firmado. Para nosotros ese es el pacto suscrito y a los vascos nos enseñan que lo que se pacta y se dice de palabra, se cumple. Por todo ello, el acuerdo sigue vigente. Y cuando alguien dice '¿Y si no lo cumplen?' Entonces el problema sería de ellos por dar su palabra y no cumplirlo. Su credibilidad quedaría bajo cero.

¿Cree usted que el PSOE y el propio Gobierno se asustó de la repercusión que tuvo la negociación con EH Bildu?

-Yo creo que hubo presiones de la OCDE, presiones de otro tipo. Pero tienen que entender que estamos en una nueva fase y lo que no vale es decir con Bildu nada, pero a la hora de apoyar a Chivite...Vamos a ser serios.

¿Hay establecida una pugna con el PNV sobre quién es más influyente en Madrid?

-No. Yo creo que no. Siempre hemos planteado que si iríamos junto como país sacaríamos muchas más cosas. Pero el PNV nunca ha entendido este esquema. Ellos entienden que es más conveniente negociar como partido en Madrid. Y el problema para ellos es que ahora Bildu juega también en esa partida, que es lo que siempre se le ha pedido que haga a la izquierda abertzale. Pero no queremos competir para nada con el PNV. Todo lo que venga para el país, es bueno para el país.

¿En qué punto se encuentra su acuerdo con ERC? Parece que desde que se desató la crisis sanitaria cada uno ha actuado por su cuenta en el Congreso.

-Nosotros tenemos el acuerdo de Lotja del Mar con JxCat, ERC, la Cup..., un acuerdo por el que los independentistas debemos jugar la partida juntos. Pero es verdad que el proceso catalán y el proceso vasco son distintos y ellos están en otra etapa. Además, están pendientes de unas elecciones. De todos modos, creo que en el estado de alarma solo una vez ERC ha votado que no, en las demás se ha abstenido como nosotros. Tenemos vigente el acuerdo y lo veremos con su presencia en la campaña electoral aquí.

¿Por qué ustedes no condenan los sabotajes a sedes de partidos? El lehendakarihapedido a Sortu que, como mínimo, diga que es atacar sedes de partidos está mal.

-A nosotros nos han hecho pintadas en una herriko -la del Casco Viejo de Bilbao- y no hemos salido como otros. Todo el mundo sabe que detrás de eso no está EH Bildu. Es más, quienes hacen las pintadas y quienes interpelan a EH Bildu solo tienen como único objetivo debilitarnos. ¿Alguien puede pensar que estamos detrás? Pues no. ¿Por qué se nos interpela a nosotros si todo el mundo sabe que no tenemos nada que ver con ello?

Según el EPPK "un determinado sector" ha utilizado el caso del preso Patxi Ruiz para atacar a Sare, Etxerat y EH Bildu. ¿A qué sector cree que se refieren los presos?

-Los comunicados del Movimiento Pro-Amnistía lo dicen con claridad. Y lo que dicen es lo que dicen. Y lo que dice este preso en concreto, lo que dicen que dice este preso, es que no quiere que ni Bildu, ni Sortu, ni LAB, ni Etxerat se ocupen de él. Es un preso que está fuera del Colectivo. ¿Quiénes están detrás? Los que mantienen una estrategia crítica con la izquierda abertzale. Esos son los que están detrás de todo esto. Yo no pongo ni nombres, ni siglas. Y todo el mundo saben quiénes son, los primeros los que nos interpelan a nosotros. Lo que pasa es que hay un interés por hacer creer que forman parte de nuestro mundo cuando no es así. No es la estrategia de Bildu, para nada.

Si los autores de los sabotajes no forman parte de EH Bildu, ¿no sería más fácil condenar esos hechos para marcar diferencias?

-Sí, pero eso lo retroalimentaría. Retroalimentaría a las dos partes, a quienes hacen los sabotaje y a quienes nos interpelan a nosotros. Si seguimos hablando de las pintadas, habrá más pintadas. Si yo hago pintadas y todo el mundo habla de ello, seguiré haciéndolas. Lo que hay que pensar es en la necesidad de sacar a los presos a la calle, para eso estamos. Y no es solo el caso de Patxi Ruiz, hay otro preso al que le ha dado un ictus a mil kilómetros de su casa, gente con graves problemas psicológicos, niños que no pueden ver a sus aitas y amas. De eso es de lo que nos tenemos que ocupar. Y haciendo esas pintadas en sedes de partidos no se contribuye a mejorar la situación de los presos.

El Colectivo de Presos agradece también la declaración conjunta firmada por nueve partidos políticos en el Congreso español y la petición lanzada por el Gobierno vasco al Ejecutivo de Pedro Sánchez para el traslado de los presos a cárceles vascas. ¿Cree que la demanda tendrá respuesta positiva?

-Fue una declaración en la que se hacía alusión a todos los presos. Se están viviendo momentos muy complicados en las cárceles. Lo que se decía es que si es un problema sanitario y se prevé un repunte, lo que hay que hacer es llevar a cada preso a su comunidad. Así no se pone en peligro ni a sus familiares ni a gente de otras comunidades. Valoramos también de forma positiva la petición del Gobierno vasco. Han pasado diez años desde el fin de la actividad de ETA. Todo el mundo decía que con el fin de la violencia armada, la dispersión iba a terminar ya que no tendría sentido. A nosotros no da igual quien traiga a los presos, pero que los traigan.

Mirando al 12 de julio, llevamos una semana en la que se habla del tripartito de izquierdas PSE, Podemos y EH Bildu.

-No vamos a engañar a la gente, pensar que hoy es posible en Euskadi un gobierno tripartito de esa naturaleza es ciencia ficción. No es una hipótesis real. La hipótesis real es que va a volver a reeditarse una UTE (Unión Temporal de Empresas) entre el PNV y el PSE. Si les dan las cuentas van a formar gobierno. Nosotros aspiramos que no les den las cuentas, pero es lo que hay.

¿Por qué dice que el tripartito es ciencia ficción? ¿No ve al PSE dando el paso?

-Ahora mismo no. No le veo en disposición al PSE para acometer una opción de este tipo.

Los últimos sondeos dan una subida a PNV y PSE con lo que la gente parece estar cómoda con el gobierno de coalición.

-Tengo mis reservas con determinados sondeos. Nosotros estamos muy tranquilos ante estas elecciones. Creo que hemos hecho honestamente lo que teníamos que hacer, decir a la gente la verdad y plantear nuestras propuestas. Ahora la gente tiene la responsabilidad de elegir. Luego no vale protestar cuando tienes la posibilidad de cambiar las cosas.

Está claro que se rompe el discurso de Podemos que apuesta firme por el tripartito.

-A ver. Nosotros gobernamos con ellos en Errenteria y en Durango. Es verdad que a nivel social tenemos afinidades con ellos, y podríamos tener también con el PSE. Pero a día de hoy, el PSE repite por activa, pasiva y perifrástica que no al tripartito. Dicen que van a presentar un gran equipo para las elecciones, pero lo que no dicen es que ese equipo está encabezado por Urkullu. El PSE dice que nunca va a votar a Maddalen Iriarte. Claro, va a votar a Urkullu.

¿Qué opina sobre el revuelo montado con el ministro Marlaska y la Guardia Civil?

-Hay dos cosas que vertebran el Estado, la Guardia Civil y el Corte Inglés. Y sobre eso no tienen fisuras. Ahora cuando dicen que la Guardia Civil manipula los informes, a nosotros nos parece el Club de la Comedia. Pero lo cierto es que si en el Estado se junta una grave crisis económica, un aumento exponencial del paro, la Guardia Civil y los sectores más reaccionarios de la judicatura, cuanto menos hay que tener las alertas muy encendidas.

Vamos, que nos aguarda un futuro si no negro, por lo menos sí bastante grisáceo.

-A la gente hay que decirle la verdad. Vamos a tener menos ingresos y más gastos ya que habrá más paro y más gente a la intemperie a la que se debe atender y no dejarle abandonada. Para ello hay que optar y priorizar los gastos. Por ejemplo, no se puede seguir manteniendo el TAV. Pero bueno, los vascos hemos salido de situaciones difíciles y podremos salir también de esta.

"El pacto para derogar en su integridad la reforma laboral del PP sigue vigente en la medida en que se trata de algo que está firmado "

"¿Alguien puede pensar que estamos detrás de los ataques a las sedes? Pues no. ¿Por qué se nos interpela

si no tenemos nada que ver?"

"No vamos a engañar a la gente, pensar que hoy en día es posible en Euskadi un gobierno tripartito de izquierdas es ciencia ficción"