El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, ha desvelado este martes que mantuvo una "discusión fuerte" con el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, por no informarle este verano de la salida de España del rey Juan Carlos I.

En una entrevista en la Cadena SER, recogida por Europa Press, Iglesias ha explicado que el propio Sánchez "se disculpó" por no haberle informado de la situación de la Casa Real y del posterior comunicado en relación al Rey emérito. "Eso le engrandece, que diga 'esto tenía que habértelo dicho' habla bien de él", ha apuntado.

"Es lógico. Es un Gobierno en el que hay un partido republicano y otro socialista, hay posiciones diferentes", ha insistido Iglesias, que ha criticado la "vergüenza" que supuso la "huida del emérito" mientras estaba "siendo investigado por delitos gravísimos".

En esta línea, Iglesias ha explicado que en esa conversación con Sánchez, que fue "siempre cordial", le trasladó su malestar porque el Rey emérito, "cuya biografía está asociada a la Transición", pudiera marcharse "a una dictadura a un hotel de lujo".

FUSIÓN BANCARIA

Por otro lado, el también líder de Podemos se ha referido a las declaraciones de Sánchez, que este lunes explicó que el sector morado del Gobierno desconocía la posible fusión entre Bankia y Caixabank. "Sobre cuestiones que me puedan molestar, no voy a comentarlo en un medio", ha asegurado.

Pese a descartar pronunciarse en los medios sobre esta cuestión, Iglesias ha reconocido cierto malestar. "Usted es muy perspicaz y se da cuenta", ha respondido Iglesias tras ser preguntado directamente por ello. "Pero por una cuestión de lealtad, si me molesta se lo digo en privado. Y lo mismo para el resto de ministros", ha añadido.

En este contexto, el vicepresidente ha dejado claro que "por su parte" no existe ningún tipo de ocultación. Ya le digo que no. No tengo el defecto de no ser transparente", ha asegurado Iglesias, que se ha mostrado esperanzado en que esta confianza sea recíproca por parte del sector socialista.

BLOQUE DE LA INVESTIDURA

El vicepresidente ha insistido este martes en apostar por el bloque de la investidura para sacar adelante los Presupuestos Generales del Estado y ha pedido "no engañar a nadie" sobre un posible acuerdo con Ciudadanos, que ve "inviable".

Ha dejado claro que la única opción que "puede dar estabilidad a la legislatura" y al propio Ejecutivo es la del bloque que permitió la investidura de Pedro Sánchez.

En esta línea, Iglesias ha dicho que respeta que la vicepresidenta primera, Carmen Calvo, asegure que lo importante no es con quien aprobar los PGE, sino que estos salgan adelante. "¿Hay que excluir a alguna fuerza? No. Pero este Gobierno existe por una mayoría muy concreta", ha sostenido Iglesias.

Así, el vicepresidente ha insistido en que el Ejecutivo no descartará a nadie de las negociaciones para aprobar los PGE. "Pero pensar que se pueden sacar con una mayoría distinta a la investidura creo, por no engañar a nadie, que no es real", ha añadido.

Iglesias ha pedido "entender" que llegar a acuerdos "tan importantes" como los Presupuestos "sobre políticas sociales y de reconstrucción con quien está gobernando con la ultraderecha es inviable en la práctica". "Y eso se va a demostrar", ha sostenido.

EL ACUERDO DE GOBIERNO ES UN "GRABADO SOBRE MARMOL" Y DEBE RESPETARSE

En este contexto, el vicepresidente ha recordado que Ciudadanos está "siendo muy coherente" en sus declaraciones públicas. "Agradezco la claridad a (Inés) Arrimadas, que dice que su objetivo es hacer que Unidas Podemos no gobierne", ha señalado.

A partir de aquí, ha continuado Iglesias, "cualquier ciudadano entiende con quién se van a poder construir las mayorías". Eso sí, Iglesias no ha descartado que la formación pueda ofrece "algún apoyo puntual" al Ejecutivo.

Con todo, el líder de Podemos ha querido dejar claro que las negociaciones que el sector socialista pueda llevar a cabo con la formación naranja deben realizarse sobre el "acuerdo" de gobierno suscrito entre PSOE y Podemos.

Ese documento debe ser, ha insistido, la fuente de inspiración de las medidas que tengan que llegar. "Un grabado sobre mármol", ha apuntado Iglesias sobre ese acuerdo que, además, a su juicio viene reforzado por el pacto alcanzado hace unas semanas en el seno de la Unión Europea.

Por eso, Iglesias ha continuado asegurando que el PSOE "puede hablar de lo que quiera con quien quiera", pero el "diálogo" sobre los Presupuesto lo llevan la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, y el secretario de Estado sobre Derechos Sociales, Nacho Alvarez.

"Si alguien piensa que este Gobierno ha mentido a los ciudadanos a la hora de presentar su programa se equivoca. Eso sería un fraude", ha añadido, para después dejar claro que la prioridad del Ejecutivo debe ser apostar por el diálogo con otras formaciones.

En concreto, el Gobierno debe priorizar la "responsabilidad" de ERC y "remangarse la camisa" para lograr su apoyo. "En política nada es gratis y todo el mundo maximiza el peso de sus diputados (...), pero ERC tiene que ser un socio fundamental", ha sostenido.

En este contexto, Iglesias también ha señalado a Compromís, PNV o EH Bildu como las formaciones con las que el Ejecutivo debe entenderse. "Con todas esas fuerzas nos tendremos que sentar, y estoy convencido de que con mucho esfuerzo y momentos de tensión al final la mayoría de la investidura será la de los Presupuestos", ha zanjado.