- La Audiencia Nacional absolvió ayer a la que fuera dirigente de ETA Carmen Gisasola y a otros dos miembros de la banda, Oscar Abad Palacios y José Ramón Martínez, del atentado cometido en Galdakao en 1990 con una bicicleta bomba en el que murió el policía Ignacio Pérez Alvarez. Los magistrados entienden que los hechos están prescritos. La Sala estima la cuestión planteada por las defensas en la que sostenían que la providencia dictada por el Juzgado Central de Instrucción número 5 el 1 de junio de 1993 no interrumpe el plazo de prescripción de los hechos objeto de enjuiciamiento.

La Fiscalía solicitó 30 años de prisión para los tres acusados por un delito de asesinato con finalidad terrorista y cargó contra Gisasola, referente de la vía Nanclares, por usar durante el juicio su “arrepentimiento” para exculparse.

Según la Fiscalía, Abad y Martínez accionaron por radio control de iniciación eléctrico el artefacto explosivo colocado en la alforja de una bicicleta que estacionaron junto al vehículo del policía, lo que le ocasionó la muerte. Gisasola y un cuarto miembro de la banda, Julián Atxurra Egurrola, supervisaron las acciones de Abad y Martínez y facilitaron la información sobre el día a día del policía.

Por su parte, el preso José Ignacio Guridi Lasa, alias Xabi, reconoció ayer frente a la Audiencia Nacional el dolor causado por ETA y expresó su respeto a las víctimas. Lo hizo durante una sesión del juicio por el que la Fiscalía solicita 52 años de prisión para él.