- El Gobierno de Navarra ha lanzado un nuevo paquete de medidas fiscales con el que busca flexibilizar el pago de impuestos por parte de pymes y autónomos y así favorecer a que las pequeñas empresas y trabajadores por cuenta propia dispongan más tiempo del dinero en sus bolsillos. Es una medida aprobada este miércoles en sesión de gobierno, que busca mejorar la liquidez del sector empresarial y que se une a los otros tres paquetes -una ley y dos decretos- que se han aprobado desde el estallido de la pandemia, y que han sido medidas de alivio para los sectores que han visto muy mermada su actividad por culpa de las restricciones derivadas del coronavirus. Las medidas, anunciadas por la consejera Elma Saiz, han sido bien acogidas por la CEN, que entiende que este tipo de decretos echan una mano a las empresas. Y tampoco afectan a la recaudación, ya que son meros aplazamientos, asegura la Hacienda.

Hay cuatro medidas principales. La primera, el aplazamiento de deudas tributarias, correspondientes a autoliquidaciones del último trimestre de 2020 y el primero de 2021. Las empresas que quieran y tengan que presentarlas entre el 1 de enero y el 30 de abril, pueden demorar su pago hasta siete meses. Los primeros tres sin intereses, siempre y cuando la cifra de negocio de dichas empresas haya sido menor a 6 millones en 2020. La segunda gran medida es la exoneración de la obligación del pago fraccionado del IRPF correspondiente al último trimestre de 2020.

La tercera, que se acorta el plazo para deducir las pérdidas en Sociedades e IRPF, trámite que pasa de seis a tres meses para la deducción de posibles pérdidas por insolvencias. Del mismo modo, se reduce a tres meses el plazo para que las cantidades adeudadas por los arrendatarios tengan la consideración de saldo de dudoso cobro.

Y, por último, se aprueba un incentivo fiscal para quienes alquilan locales que se destinan a comercio o hostelería. A partir de ahora, se podrá deducir la rebaja que se haga del alquiler y que se pacte entre ambas partes. Una medida a la que podrá acogerse quien esté interesado durante el primer trimestre de 2021.

La Hacienda Foral no espera que este paquete tenga afecciones reseñables en la recaudación, ya que son básicamente aplazamientos. Y, por otro lado, tanto la CEN como asociaciones de pequeña empresa ven con buenos ojos este decreto, ya que en última instancia permite mantener mayor liquidez en los bolsillos de los trabajadores autónomos y pequeños empresarios durante más tiempo.

Siete meses de prórroga para las autoliquidaciones. Autónomos y pymes podrán disponer de hasta siete meses más para abonar las autoliquidaciones correspondientes al último trimestre de 2020 y el primero de 2021, siempre que la fecha de pago estuviera comprendida entre enero y abril de 2021. Durante los tres primeros meses de prórroga, además, no se cobrará ningún interés.

Rebaja de los plazos para deducir pérdidas. Empresas y autónomos podrán declarar antes sus pérdidas para deducírselas antes. El plazo baja de los seis a los tres meses. También a tres meses se rebaja el plazo para poder declarar las deudas de los arrendatarios como saldos de dudoso cobro y, por tanto, obtener ayudas por ello.

Incentivo fiscal al alquiler. A los que alquilan locales para comercios y hostelería se les va a dar la oportunidad de deducirse la cantidad que ofrezcan rebajar en las cuotas a los arrendatarios.

El secretario general de la CEN, Carlos Fernández Valdivielso, hizo una primera lectura del decreto sin haber podido leerlo en profundidad. Pero consideró que los aplazamientos permiten dar oxígeno a los más de 47.000 autónomos y 15.000 pymes de Navarra.