Varias personas que fueron detenidas hace diez años por su presunta pertenencia a Ekin han pedido al Gobierno de Navarra que promueva una investigación sobre la tortura, después de que este martes se haya conocido una sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos que condena a España por no investigar suficientemente la denuncia de torturas de uno de esos detenidos, Iñigo González Etayo, natural de Barañáin.

En una rueda de prensa ofrecida este martes, el propio Iñigo González, acompañado de otras personas que también fueron detenidas en esa operación, ha leído un comunicado en el que se señala que "las personas torturadas merecen reconocimiento, reparación y garantías de no repetición" y por ello ha instado "a las autoridades públicas de Navarra a dar pasos en este sentido".

Así, solicitan al Gobierno de Navarra que "impulse una investigación para esclarecer cuántas personas han podido padecer tortura a manos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en Navarra".

Además, en el comunicado se afirma que "el Gobierno de España debe reconocer la utilización de la tortura en contra del independentismo en Euskal Herria no como un hecho puntual sino como una práctica sistemática, como así reconocen diferentes informes y estamentos".

Por medio de este texto, agradecen también "todas las muestras de cariño y afecto que estamos recibiendo". "Animamos a la ciudadanía a seguir peleando para lograr la desaparición de esta lacra y conseguir que toda la verdad salga a la luz", señalan.