- A menos de un año de las presidenciales en las que buscará seguir cinco años más en el Elíseo, el jefe de Estado francés, Emmanuel Macron, apuesta por un ambicioso plan de inversión industrial como carta de presentación para lograr ese objetivo.

Sin grandes reformas que aprobar y tras 18 meses marcados por la pandemia, en los que la acción gubernamental ha estado centrada en su combate, Macron prepara este verano una ofensiva que situará a la economía en la vanguardia de sus prioridades.

El presidente francés ya ha comenzado a perfilar los contornos de su plan, que ha bautizado como “la Francia de 2030” y que se inspira en la colosal inversión pública lanzada en Estados Unidos por Joe Biden.

Más modesto, el proyecto francés, que debe ser coordinado en las próximas semanas para ser lanzado en septiembre, tendrá entre 20.000 y 30.000 millones y buscará devolver al país el brillo industrial que ha perdido en los últimos años.

Eso constituye, según Fourquet, otro elemento electoral en favor del presidente, ya que los estudios de opinión muestran que los franceses han tomado consciencia de las carencias industriales del país durante la pandemia.

Los ciudadanos han visto a su país expuesto a la competencia internacional en muchos sectores y el Gobierno quiere ahora recuperar soberanía y reducir la dependencia externa.

En palabras de Macron, durante un discurso pronunciado el pasado 12 de julio, “levantar los campeones del mañana en el mundo digital, de la industria verde, la biotecnología o la agricultura, los que marcarán el futuro”.

El fin es ampliar la base industrial del país, donde el 85% depende en la actualidad de cuatro ramas, la aeronáutica, el lujo, la agroalimentaria y la sanitaria, indicó el ministro de Economía, Bruno Le Maire, a Le Monde.

Macron necesita tener un proyecto que le permita presentarse ante el país frente al descontento que canal

El rumbo está fijado y su estrategia de combate de la crisis sanitaria le ha vuelto a colocar en el centro del debate, muy criticado, pero también apoyado por políticos de todos los bandos, desde alcaldes socialistas a presidentes de región conservadores.