El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, rechaza que se pueda establecer relación alguna entre su visita a Emiratos Árabes Unidos y el hecho de que resida en este país el rey Juan Carlos, y recalca, aludiendo al interés político y económico de este viaje: "Voy a lo que voy".
El Gobierno ya había asegurado que durante esa estancia no habría contacto alguno entre Sánchez y el rey Juan Carlos, quien reside en Abu Dabi desde agosto de 2020 a la espera de que la Fiscalía resuelva las investigaciones abiertas sobre él.
En una conversación informal con los periodistas en el avión oficial camino de Dubái, el jefe del Ejecutivo español ratificó que no verá al rey emérito pese a que su agenda incluye su desplazamiento a Abu Dabi para reunirse con el príncipe heredero y gobernante de facto de Emiratos Árabes, Mohamed bin Zayerd Al Nahyan.
Sánchez evitó comentar si la situación de don Juan Carlos será un asunto que trate en esa reunión y se limitó a señalar: "voy a lo que voy".
El avión de la Fuerza Aérea Española en el que Sánchez viajó junto a su esposa, Begoña Gómez, y el resto de su delegación, aterrizó en el aeropuerto internacional de Dubái, donde les esperaban miembros de los servicios de protocolo emiratíes y el embajador de España en el país, Íñigo de Palacio.
Junto a Sánchez viajan su ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares; la titular de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, y un grupo de empresarios españoles encabezados por el presidente de la patronal CEOE, Antonio Garamendi.
Esa presencia denota la trascendencia económica de este viaje de Sánchez, cuya agenda oficial en Emiratos Árabes se limitará a la jornada del miércoles, 2 de febrero.
La intención es sellar una asociación estratégica entre los dos países que permita en el terreno económico aumentar la inversión emiratí en España e impulsar la presencia de empresas españolas en ese país.
Sánchez se reunirá en Dubái con el vicepresidente, primer ministro y ministro de Defensa de Emiratos, el jeque Mohamed bin Rashid al Maktum, y después se trasladará a Abu Dabi para mantener un encuentro con el príncipe heredero y gobernante de facto de Emiratos Árabes Unidos, Mohamed bin Zayerd Al Nahyan.
El Gobierno español otorga gran relevancia a la faceta inversora ya que Emiratos cuenta con tres de los fondos de inversión más importantes del mundo: Abu Dabi Investment Authority, Mubadala e Investment Corporation.
Entre los tres manejan activos por valor de 1,3 billones de euros, una cifra cercana al PIB español.
