Una Formación Profesional (FP) está más marcada por el inicio inmediato de la carrera profesional; otra, por la preparación didáctica. Una se desarrolla en Alemania, y la otra en Navarra. Y ambos sistemas aprenden el uno del otro durante una experiencia de intercambio, a través del programa Erasmus+, mediante la que ocho estudiantes alemanes pasan ahora 15 días en Pamplona para realizar unas prácticas en el CIP Virgen del Camino. Y en la primera quincena de mayo, cinco estudiantes del grado de medio de Mantenimiento del centro navarro acudirán a tierras germanas.

Se trata de la primera vez que esta experiencia se realiza en este grado, aunque se llevaba al menos dos años trabajando entre docentes para llegar a este punto, y Virgen del Camino lleva al menos cuatro ejercicios con otros proyectos de intercambio, según precisa su director, Dionisio Butrón. En este caso, el grupo procede del politécnico (de FP) Berufskolleg Geldern, de Kreis Kleve, el distrito del noroeste alemán de Cléveris. Se trata de un centro de unos 2.500 estudiantes y 120 docentes. Esa proporción es posible porque la mitad de ese alumnado forma parte de la FP dual, que en Alemania lleva a los estudiantes a trabajar, y sin experiencia previa, en empresas. También cobran, eso sí, desde el primer día. En el caso de los jóvenes llegados a Navarra, ingresan unos 780 euros al mes brutos, cifra que depende del curso en el que están.

En su caso, están en el tercer año de una formación que se alarga tres ejercicios y medio, y para que puedan realizar el intercambio necesitan el visto bueno de las empresas en las que trabajan, algo que depende habitualmente de su rendimiento y de si estas firmas pueden prescindir de esa mano de obra durante estas dos semanas.

Del sistema educativo de la Comunidad Foral, los docentes alemanes miran con interés el número más reducido de estudiantes. “Aquí quizá les falta ese estrés que marca el mercado laboral, la necesidad de terminar un trabajo para una hora, y a nosotros nos parece muy interesante ese tiempo de preparación de los estudiantes navarros, más relajada y muy centrada en la didáctica”, explica el tutor del grupo, Matthias Sommer.

Durante esta estancia en Navarra, asisten por las mañanas a las clases con un contenido más “práctico”, según explica uno de los docentes de Virgen del Camino, Roberto Carlosena. Y una de las cuestiones que más destaca el alumnado alemán de la experiencia es, precisamente, la posibilidad de utilizar talleres como el de Automoción, donde disponen de varios vehículos, de diferentes marcas y de aparatos de diagnóstico.

El grupo se aloja, por otra parte, en el Albergue de Pamplona, en la calle del Carmen, y durante la visita puede conocer también la ciudad. De ella destacan su historia, sus paisajes, su gastronomía... y la cerveza, según enumeraron poco después de su llegada a la capital navarra.

La expedición pretende, además, cerrar la posibilidad de que su alumnado haga prácticas aquí con otras entidades, como María Ana Sanz o el centro Linden, y fomentar así la relación entre Kleve y Navarra. El objetivo consiste en aprender de otro sistema y trasladar hasta la Comunidad Foral otra experiencia.

La expedición alemana. Está formada por ocho jóvenes de entre 19 y 23 años. Ahora afrontan su tercer año de una formación en FP dual de tres años y medio. Trabajan en empresas y durante una media de algo más de una jornada por semana completan su formación en Automoción y mantenimiento de vehículos en el centro educativo. Para esta experiencia, que es un Erasmus+, han sido seleccionados por su conocimiento técnico y habilidad social.

La expedición navarra. Estará formada por cuatro alumnos y una alumna de 2º curso del grado medio de Electromecánica de vehículos automóviles, que viajarán a Alemania durante la primera quincena de mayo. Es la primera vez que en este grado de Virgen del Camino hacen esta experiencia. En este momento, estos jóvenes están realizando sus prácticas en empresas.