Badajoz. El agente fuera de servicio de la Guardia Civil asesinado esta madrugada en Don Benito (Extremadura) fue apuñalado después de intentar mediar en una reyerta en un bar y no hay indicios de que conociera a los agresores. Cuatro personas han sido detenidas por estos hechos.

Portavoces de Policía Nacional y Guardia Civil en Extremadura han facilitado estos datos del suceso que ha costado la vida a un guardia civil 50 años, destinado en Zarautz (Gipuzkoa), tras recibir dos puñaladas en el cuello y en el costado.

El agente había nacido en Don Benito, donde reside parte de su familia y a donde viajaba con frecuencia para disfrutar de días de descanso, como en este caso el puente de Todos los santos.

Esta madrugada, sobre las 2:00 horas, se encontraba en una zona de ocio de la Plaza de España cuando intervino para mediar en una reyerta y se identificó como guardia civil para "intentar calmar los ánimos", según ha explicado uno de los portavoces policiales.

Al parecer, la pelea se inició dentro de un local aunque fue en el exterior donde se produjeron los hechos.

El cadáver del agente ha sido trasladado al Instituto de Medicina Legal de Badajoz, donde se le está practicando la autopsia.

Según ha informado la Delegación del Gobierno en Extremadura en un comunicado, los detenidos se han personado en la Comisaría de la Policía Nacional de Don Benito tras las "intensas gestiones" realizadas por un abogado que los representa con distintos agentes policiales, encabezados por el comisario provincial de Badajoz, Juan María Cervera.

La muerte del guardia civil Juan Francisco Lozano Díaz, de 50 años, se produjo tras recibir dos puñaladas en el cuello y el costado.