Inclusión, diversidad y visibilidad fueron las tres palabras que pronunció el actor con discapacidad Jesús Vidal, y que dieron la vuelta al mundo, tras recibir el Goya al mejor actor revelación por la película Campeones. En el filme, un entrenador profesional de baloncesto muy competitivo es obligado por un juzgado a capitanear un equipo formado por personas con discapacidad para los que ganar no es lo más importante. Su mensaje integrador se ha hecho eco en todos los ámbitos, pero no deja de ser una película. No obstante, a veces, la realidad supera a la ficción, como es el caso de This Capacited Team, un equipo de robótica formado por chicos y chicas con discapacidad de Pamplona que hoy participa en la First Lego League.

Sin embargo, en este caso, su entrenadora, Ainhoa Inchusta, de 16 años, lejos de ser obligada fue la que hizo realidad este equipo, para el que aprender y participar en esta experiencia es lo único que importa. “Ellos probablemente no saben ni que hay premios. Quieren ir, hacer las pruebas y disfrutar, no les importa ganar”, relata Ainhoa, quien ya el año pasado se presentó a la First Lego League con su colegio, pero que ahora lo hace con el primer equipo de personas con discapacidad que se presenta a este concurso. Concretamente, han elaborado un proyecto científico sobre cómo mejorar la vida de los astronautas que tendrán que presentarlo y han construido un robot para que supere una serie de pruebas.

“El año pasado discutíamos cuando no nos salían las cosas, nos frustrábamos. Ahora es diferente, los chicos si fallan lo intentan una y otra vez. Me están enseñando ellos más a mí que yo a ellos, he aprendido que si algo no sale hay que tener paciencia y volverlo a intentarlo”, relata.

A Ainhoa le surgió la idea de formar este grupo tras la edición del año pasado. Se percató de que no había ninguna persona con discapacidad participando y le llamó la atención pues su hermano pequeño también tiene discapacidad. “Le dije a mi madre que podríamos formar un equipo con los chicos de la Fundación Brazadas de Superación, a la que va mi hermano. Se lo comentamos al resto de padres y madres y salió adelante la idea”, recuerda la joven.

el proceso El pasado octubre, Ainhoa, los seis integrantes con discapacidad del equipo -Íñigo Astráin, Ana Ursua, Sara Zúñiga, Ignacio Chaverri, Juan Echavarri y Marcos Beriáin- y Amaia Larrea, Leire Larrea, Minerva Astráin y Guillermo Landa fundaron This Capacited Team, y todas las semanas se reúnen dos horas los sábados para entrenar. “Además de los seis chicos, también el segundo entrenador, Íñigo Erroz, tiene discapacidad y ocupa este puesto ya que no podía inscribirse por superar la edad”, explica Ainhoa.

Al principio, la joven confiesa que todo se hizo un poco cuesta arriba, sobre todo, a la hora de empezar a construir el robot: “Empezamos con pequeños pasos, uniendo piezas y yo les enseñaba lo que había aprendido en las clases de robótica en el colegio”. Poco a poco, el equipo fue adquiriendo conocimientos y ha acabado superándose a sí mismo. “Me he dado cuenta de que hasta yo tenía prejuicios porque han hecho cosas que no pensaba que podrían hacer. Ellos no se ponen límites y enseñándoles lo básico han sabido trabajar de maravilla”, apunta Ainhoa.

A sus 16 años, las tardes de los sábados las pasa dando clases de robótica en lugar de descansar y salir a la calle como el resto de jóvenes de su edad. “No tengo ningún problema en no quedar con mis amigas. Es verdad que me ocupa tiempo pero lo hago con mucho gusto porque veo que a ellos esto les supone mucho”, comenta.

De cara a la competición, Ainhoa no tiene pretensiones de hacerse con ningún premio: “Ha sido un reto importante porque les hemos dado la oportunidad de participar, que era algo que no se les había ofrecido antes”, recalca la joven que añade que esta iniciativa también les ha servido para “hacer un gran grupo. Es alucinante ver la confianza y la buena relación que hay entre ellos”, indica.