Pamplona - El cruce de las diversas estadísticas e indicadores socioeconómicos confirman en este arranque de año una doble conclusión en Navarra. Por un lado se constata que el esfuerzo económico realizado en los diversos sistemas de protección social, especialmente con la reforma de la renta garantizada, han evitado que los efectos de la crisis económicas dejaran descolgada a una parte importante de la sociedad navarra que se quedó sin empleo ni prestaciones estatales; y por otro, la propia recuperación económica de la Comunidad Foral, con sus dificultades en cuanto a calidad de empleo, está tirando de nuevo de la inserción social a través de la inserción laboral de este colectivos más desfavorecido que llegó a cifras preocupantes en con una bolsa de pobreza severa traducida en 8.358 hogares sin ingresos en 2015 frente a los 5.919 de 2018. Esta es la conclusión que adelantó el vicepresidente de Derechos Sociales Miguel Laparra en el arranque de la jornada organizada en Pamplona por la Red Navarra de la Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social junto con sus homólogos del Estado y de Europa para debatir sobre “modelos de intervención social”. Los dos datos que el vicepresidente trajo a colación para apuntalar su tesis fueron, por un lado, que por tercer mes consecutivo desde enero se ha consolidado un descenso en el número de solicitantes de Renta Garantizada hasta suponer un 9% menos de las peticiones que hubo en marzo de 2018, mes en el que por cierto se llegó al máximo de la cobertura social mediante este instrumento al alcanzar a 12.780 unidades familiares. Al mismo tiempo, 2019 ha confirmado también los datos sobre inserción laboral del año pasado de este colectivo de personas desfavorecidas (una de cada tres personas en edad laboral que recibían una ayuda lograron un contrato) dentro de un contexto general de bajada del paro en Navarra, pese al incremento de la población activa hasta suponer un 10%, casi la mitad de los momentos más duros de la crisis.

La Red Navarra de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social junto con la Red estatal EAPN-ES (Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social en el Estado Español) organizó ayer en el Palacio Condestable, la jornada Pobreza, Empleo y Bienestar Social: Modelos de intervención social en ámbito europeo, estatal y autonómico donde se dieron cita investigadores y gestores del tema de la inclusión social locales, autonómicos e internacionales. El objetivo era acercar a las personas que trabajan en ámbitos asociados a la exclusión social, los diferentes modelos de intervención social. Amaia Leranoz, presidenta de la Red Navarra de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social, destacaba antes de su arranque que “la cada vez mayor complejidad de los procesos de exclusión social hacen que sea más necesaria que nunca la inversión en formación, innovación e intercambio de experiencias sobre modelos de trabajo e intervención para favorecer la inclusión social”. La jornada comenzó con la ponencia marco a cargo de Sian Jones, Coordinadora de Políticas de EAPN Europa, Modelos de Intervención Social en Europa: el papel de la Unión Europea en el apoyo a una sociedad más igualitaria quien iba a abordar las reformas en los distintos modelos europeos de bienestar social en Europa y el papel que desempeña la Unión Europea en estos procesos. A continuación se dio paso a unas charlas sobre Pobreza, Empleo y Bienestar Social: casos de éxito a nivel europeo y estatal, sobre retos y oportunidades en la colaboración entre Administración Pública y Tercer Sector. La jornada finalizó con una mesa redonda donde con instituciones públicas y del Tercer Sector a debatir sobre los nuevos modelos de intervención y su aplicación en el ámbito autonómico y local.

reunión europea en baluarte Este acto tendrá una continuación esta semana ya que Navarra ha sido elegida para la celebración del Comité Ejecutivo de EAPN Europa haciéndolo coincidir con el 25º aniversario de la Red Navarra de Lucha contra la Pobreza y Exclusión Social y el 15º aniversario de EAPN España. Este comité tendrá lugar en Baluarte los días 4 y 5 de abril, en la que participarán más de 30 representantes de redes nacionales organizaciones sociales de toda Europa para trabajar en torno a la inclusión social. Leranoz resalta la importancia de abrir el foco en clave internacional mirando también a Europa.

El Post-it

Visión crítica. El presidente de la Red de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social (EAPN) en Europa y en España, Carlos Susías, reivindicó a nivel estatal y europeo un giro para las políticas de erradicación de la pobreza si se siquiere llegara cumplir los compromisos. En el caso de España, el compromiso era reducir el número de personas en situación de pobreza en 1 millón y medio de 2010 a 2020, y sin embargo, “ahora tendríamos que reducir casi 2 millones y medio para conseguir ese mismo objetivo, porque ha aumentado la pobreza significativamente”. En este sentido alertó sobre la precarización del empleo ya que un 30% de los pobres tienen contrato, señaló.

En marzo de 2019 hubo 1.565 solicitudes frente a 1.735 del mismo mes en 2018.

Según el informe periódico y anual sobre Renta Garantizada (RG) en Navarra, 2018 concluyó con un total de 12.562 unidades familiares con derecho a percibir esta prestación. Respecto al pasado mes de diciembre de 2017, la diferencia es tan solo de 22 unidades familiares más. Es también significativo que tras alcanzarse un máximo en marzo de 2018, de 12.780 unidades familiares, en los últimos nueve meses se haya producido una disminución progresiva de los que reciben mensualmente RG, del 1,7% entre marzo y diciembre. Un dato que parece consolidarse en el inicio de 2019, donde las nuevas solicitudes han bajado un 4,2% en enero y febrero, respecto a los mismos meses del año anterior. Marzo ha abundado en esta tendencia con una bajada del 9%

Más expedientes fiscalizados y un 4,4% de incumplimientos. El incremento del control ordinario sobre las prestaciones entre 2015 y 2018, que ha alcanzado el 72% de los expedientes, frente al 21,37% de 2015. Se aprecia que hay un 4,41% en los que se ha dado algún tipo de incumplimiento de la normativa, lo que supone un crecimiento de 1,28 puntos porcentuales en 2018, fruto, precisamente, del incremento de los mecanismos de control y seguimiento.

Más personas que tenían renta garantizada vuelven al mercado laboral. Un total de 6.997 personas en edad laboral que han percibido la prestación han sido contratadas a lo largo de 2018, con un total de 21.064 contratos (es decir, una media de 3,01 contratos por persona). Si se compara con el año 2016, el crecimiento en el número de personas contratadas ha sido del 24,5%. El número de unidades familiares que ha contado con algún ingreso por trabajo ha sido, en 2018, 4.114, lo que supone un crecimiento del 90% respecto a 2016. Las personas con prestación que fueron contratadas, representan el 30% de las personas perceptoras en edad laboral. Se observa, además, un importante crecimiento de los expedientes en los que algún miembro de la unidad familiar trabaja (un 90% más que en 2016); también aumentan los expedientes con ingresos por otras prestaciones o pensiones, pero en este caso solo un 16,5% respecto a 2016. Todo ello hace que se hayan reducido unidades familiares que no cuentan con ningún tipo de ingresos al margen de la renta garantizada (51%).