PAMPLONA. La Policía Foral investiga a seis conductores como presuntos autores de delitos contra la seguridad del tráfico.

Cuatro de estos hechos han ocurrido en Villafranca, Galar, Olite y Ultzama y se trata una alcoholemia positiva, conducir sin tener carné o tenerlo retirado por decisión judicial.

Uno de estos conductores, un vecino de Ansoáin de 34 años, ha sido denunciado también por utilizar el teléfono móvil mientras conducía, lo que supone una sanción de 200 euros y la pérdida de 3 puntos.

Los otros investidos han sido en Pamplona y Estella, por alcoholemias positivas.

En el caso de Estella el conductor, de 29 años, indicó a los agentes que no llevaba documentación y facilitó un número de DNI que no correspondía con el del titular del vehículo que conducía y que tiene una suspensión temporal en vigor que finalizaba en septiembre del 2020.

Cuando los policías le pidieron que les acompañara a comisaría para comprobar la veracidad de la información, el hombre declaró su verdadera identidad.

Además una agente, que había atendido un accidente unos días antes, lo identificó como uno de los implicados. En esa ocasión tampoco llevaba documentación y facilitó el mismo número de DNI, el de su hermano, para evitar el delito de conducir sin permiso, aunque su actitud podría ser considerada un delito de usurpación de identidad.

Por otra parte ayer, en un control cerca de Senda Viva, fueron denunciados por conducir bajo los efectos de las drogas otros dos conductores, una vecina de Barcelona y un vecino de Valtierra, que dieron positivo en anfetaminas/metanfetaminas y canabis.

Los policías pusieron asimismo diversas multas por llevar en el coche menores sin sistema de retención, no hacer el curso de reeducación vial tras la pérdida de los puntos, y circular con los neumáticos muy por debajo del límite de seguridad.