PAMPLONA. El recién elegido rector de la Universidad Pública de Navarra, Ramón Gonzalo, acomete su mandato "con la responsabilidad y el orgullo" de ser el primer alumno del centro que asume este cargo, desde el que pretende hacer que la UPNA "esté mucho más centrada en las personas" y más relacionada con el tejido socioeconómico de la Comunidad foral.

Elegido el pasado 9 de junio con el 61,27 % del voto ponderado frente al 38,73 % de la otra candidata, María José Beriáin, Gonzalo (Logroño, 1972) es ingeniero de Telecomunicación y doctor por la propia UPNA, catedrático en el área de Teoría de la Señal y Comunicaciones y, en la legislatura del rector que finalizado su mandato, Alfonso Carlosena, vicerrector de Investigación.

Aún sin cerrar el nombramiento del equipo del que se rodeará, la toma de posesión del rector se celebrará el próximo mes, un mandato que en una entrevista con Efe reconoce que comenzará con el reto de poner en marcha la histórica demanda del grado de Medicina, para el que la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación (ANECA) ya ha dado su autorización.

Ha sido el primer alumno de la UPNA en llegar a ser su rector. ¿Tiene un especial significado?

Respuesta.- Creo que es importante porque en el fondo es un signo de que la universidad ha ido madurando. Y personalmente para mí ha sido bonito, porque es una institución a la que quiero tanto, y supone una responsabilidad y un orgullo convertirme en su rector.

P.- En las elecciones ganó en todos los sectores excepto en el de estudiantes. ¿Ha analizado ya por qué?

R.- Realmente la diferencia fue en el campus de Tudela, y la conclusión es que tendremos que trabajar con los alumnos, dialogar con ellos, ver qué piden y qué necesidades tienen, y a partir de ahí tomar decisiones. Algunas cosas que demandan las trabajaremos con ellos, sobre todo intentar separar los exámenes ordinarios de los extraordinarios, y también intentar que participen más de muchas cosas.

P.- Pertenecía al equipo rectoral anterior y por tanto muchos le consideran continuista. ¿En qué estado recibe a la UPNA y qué proyectos cree necesario acometer?

R.- Yo creo que no voy a ser continuista, aunque hay cosas que durante estos cuatro hemos hecho bien y la idea es consolidarlas y que sigan funcionando. Pero habrá cosas que tendremos que cambiar porque la propia comunidad universitaria nos lo está pidiendo. Sobre todo en el terreno de las personas, intentaremos ir modificando un poco la política de profesorado. Vamos a intentar hacer un análisis real de las necesidades en cada uno de los departamentos y decidir qué podemos hacer para consolidar, promocionar o buscar personal.

Lo mismo en enseñanzas, intentaremos ver cómo salir de las cosas generalistas y ver en cada facultad cuáles son sus necesidades y problemas y, dentro de unas reglas que sean más o menos las mismas para no hacer cosas arbitrarias, aplicar políticas diferentes en cada caso, bien entendidas y bien explicadas.

P.- Su predecesor, Alfonso Carlosena, en su día alertó del envejecimiento del profesorado y su desmotivación

R.- La franja de edad del personal es de unos 55 años para arriba, y el gran problema que tenemos es la tasa de reposición, que estamos envejecidos pero no nos estamos jubilando. En 2018 se jubilaron 6 profesores, y eso hace que nuestra capacidad de sacar plazas nuevas sea de 6 personas.

Sí es cierto que sobre todo el año que viene y los siguientes tenemos previsto crecer mucho en la capacidad de sacar profesores, por una serie de circunstancias. Y nuestra idea es intentar mitigar esto, poder sacar plazas y atender a las aspiraciones de la gente para que pueda promocionar.

P.- El reto más inmediato será la implantación de Medicina, casi con total seguridad a partir de este próximo curso

R.- Estoy convencido de que era una necesidad para Navarra, pues tener este grado y seguir formando médicos va a potenciar el sector biosanitario en Navarra. Tenemos un complejo sanitario muy potente pero le faltaba la parte docente, una demanda de la sociedad navarra y espero que la cumplamos.

Sin embargo, poner Medicina no es a cualquier precio, hay que hacerlo con la máxima calidad. Llevamos trabajando en este grado más de dos años y no solo depende de la UPNA, sino que el departamento de Salud se tiene que implicar mucho porque la mayor parte de los profesores vendrán de ahí. Debemos llegar a convenios con ellos para ver cómo su personal puede implicarse en la docencia y reducir su carga asistencial. La apuesta debe ser de las dos partes.

P.- ¿La UPNA tiene completado con este su mapa de titulaciones?

P.- No, hay que seguir trabajando un poco en él, porque somos la tercera universidad pública más pequeña de España en cuanto al número de alumnos y tenemos capacidad de crecimiento. Para ello hay que adaptar las necesidades de nuestros estudiantes con las demandas socioeconómicas de Navarra, y meditarlo bien.

El año pasado salieron de la Evaluación para el Acceso a la Universidad (EVAU) -antigua Selectividad- en Navarra más de 3.000 alumnos, y la UPNA tienen una capacidad en primer de unos 1.800 alumnos, así que hay margen para crecer, pero tiene que ser todo muy pensado y razonado.

P.- Su predecesor ha estado solo una legislatura. ¿Cree suficientes 4 años para acometer un programa?

R.- El proyecto que yo presenté es bastante ambicioso y espero tener un buen equipo que me ayude a llevarlo a cabo. Creo que en cuatro años se puede hacer, es un proyecto pensado para cuatro años.

P.- ¿De qué equipo se rodeará?

R.- No lo tengo cerrado, pero sí cambiará la estructura y haremos un vicerrectorado solo de Profesorado, cuando veníamos de un vicerrectorado de Economía, Planificación y Profesorado. Voy a crecer respeto a Alfonso Carlosena, que fue muy austero en su número de vicerrectores, aunque no mucho, uno o dos más.

P.- ¿Cómo le gustaría cerrar su legislatura en cuatro años?

R.- Espero que la UPNA esté mucho más centrada en las personas, que la comunidad universitaria se encuentre a gusto desarrollando sus labores. Aunque ya hemos hecho mucho estos 4 años, que la universidad esté más relacionada con el tejido navarro tanto social como económico. Que nos vean como su universidad, porque es uno de los motores fundamentales de desarrollo de la región.