Pamplona - La campaña de vacunación antigripal de la temporada 2018-2019 ha evitado en Navarra alrededor de 200 fallecimientos, 1.000 consultas en atención primaria, 134 hospitalizaciones y 13 ingresos en UCI, según el Boletín de Salud Pública. El informe dice que en total se distribuyeron 129.990 dosis, un 4% más que en el año anterior, con lo que se alcanzó una cobertura del 17,1% de la población no institucionalizada, si bien entre las personas mayores de 65 años se llegó al 59%, algo más que en la temporada anterior.

una vacuna según la oms De acuerdo a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, se utilizó la vacuna trivalente, que incluyó las cepas A/Michigan/45/2015 (H1N1), A/Singapore/INFIMH-16-0019/2016 (H3N2) y B/Colorado/06/2017 (Victoria), siendo la gripe A (H1N1) la predominante en la primera mitad de la onda epidémica y la gripe A(H3N2) en el segundo periodo. La gripe siguió en Navarra un patrón típico en su presentación y duración, con un nivel de intensidad gripal medio. En total se notificaron 15.031 casos (24 por 1.000 habitantes), con un valor intermedio en el rango de las cinco temporadas anteriores (22-31 casos por 1.000). El umbral epidémico se superó durante 10 semanas, entre la última semana de diciembre de 2018 y la primera de marzo de 2019, y el pico se alcanzó en la cuarta semana de enero, con 476 casos por 100.000 habitantes. En comparación con otras temporadas, la incidencia de síndromes gripales fue media-alta en niños, intermedia en los grupos de edad mayores de 15 años, y baja en mayores de 65 años. En total, se registraron 480 ingresos hospitalarios con confirmación de gripe mediante frotis (frente a los 807 del período anterior), 33 ingresos en UCI (39 en la temporada 2017-2018) y 26 fallecimientos vinculados a esta enfermedad (42 un año antes).

una gripe menos grave El estudio añade que las tasas de gravedad y letalidad registradas en esta última temporada han sido inferiores a las de la anterior. En cuanto a la efectividad de la vacuna, indica que proporcionó una protección moderada para casos de gripe no complicados y alta frente a las formas clínicas más graves. A partir de la información de casos de gripe confirmados, y comparando su aparición en personas vacunadas y no vacunadas, se estima que la efectividad de la vacuna para prevenir defunciones en pacientes hospitalizados o ingresos en UCI con gripe confirmada fue del 65%. Otros datos apuntan que la vacunación en la temporada actual redujo el riesgo de gripe confirmada por laboratorio un 38% con respecto a las personas no vacunadas. Por tipos, la efectividad vacunal alcanzó el 57% frente al virus A(H1N1) y bajó al 13% frente al virus A(H3N2). Este análisis de la incidencia y características de la gripe en Navarra ha sido posible gracias a la labor de vigilancia epidemiológica realizada por el Instituto de Salud Pública de Navarra a partir de la información que proporciona la red de centros de salud centinelas y el sistema de declaración de casos de gripe hospitalizados. Y al respecto el Instituto afirma que la vacunación antigripal es la principal medida disponible para prevenir la gripe y sus consecuencias, especialmente en personas con alto riesgo de complicaciones. De hecho el objetivo de las campañas de vacunación anuales es proteger a tres grupos de población: las personas más vulnerables y con mayor riesgo de presentar complicaciones en caso de padecer gripe, las que pueden transmitir la gripe a este grupo de alto riesgo y los trabajadores que proporcionan servicios esenciales a la comunidad, informaron desde el Instituto. - D.N.

Mayores de 60 años. El grupo de mayor riego engloba a mayores de 60 años, mujeres embarazadas, adultos y menores inmunodeprimidos o con enfermedades crónicas (dolencias cardiovasculares, neurológicas, respiratorias, diabetes, obesidad mórbida, insuficiencia renal, cáncer o ciertos trastornos cognitivos, entre otras enfermedades) y quienes conviven en residencias, instituciones o en centros que prestan asistencia a enfermos crónicos de cualquier edad.

Menores en tratamiento. En este grupo se incluyen menores y adolescentes de 6 meses a 18 años en tratamiento prolongado con aspirina y se pone especial énfasis en personas que precisan seguimiento médico periódico o que hayan sido hospitalizadas en el último año.

Profesionales. Personal sociosanitario.