La necesidad de ayudar e invertir el tiempo en generar una aportación social está más al día que nunca y cada día surgen nuevas iniciativas de voluntariado cada vez más originales. Además de la amplia oferta, los interesados tienen oportunidad de acceder a todas las opciones con un simple clic a través del ordenador o dirigiéndose a las instalaciones de la entidad en la que interesa hacer el voluntariado.

La dedicación y la modalidad también varía de una oferta o necesidad a otra. Actualmente, la experiencia se puede llevar a cabo tanto de forma presencial como remota y el interesado acuerda con la entidad las horas que se dedicarán al voluntariado. El objetivo, que tanto el voluntario como los usuarios salgan beneficiados para que el proceso sea lo más agradable posible para ambas partes.

Campos de voluntariado Entre el voluntariado presencial, los campos de voluntariado son cada vez más habituales en la oferta variada de necesidades. Desde el servicio de voluntariado del Gobierno de Navarra y en colaboración con el departamento de medioambiente, se ha creado una nueva modalidad de campo de voluntariado alrededor del camino de Santiago pero con una característica muy especial, será itinerante.

La primera convocatoria de este proyecto se realizará durante este mes de agosto y contará con dos tandas de 6 voluntarios de diferentes perfiles profesionales que se dedicarán a la limpieza del camino navarro y a la concienciación de los peregrinos. Esta primera toma de contacto servirá para detectar necesidades e identificar posibles carencias a suplir en futuras ediciones.

Experiencia positiva La dedicación de este tiempo libre para ayudar a los demás es un acto que satisface enormemente a la mayoría de los voluntarios. Este es el caso de Feli Villacampa, voluntaria de Paris 365, quien está “muy a gusto como voluntaria. Considero muy importante contribuir con mi tiempo para ayudar a los demás”, destaca. Su voluntariado se centra en ayudar en tareas administrativas, “hago de todo un poco. Me encargo de responder llamadas, hago algo de papeleo, lo que toque”, resume.

de usuario a voluntario También los hay quienes, después de beneficiarse de la aportación de unos voluntarios, se han animado a aportar su granito de arena. Es el caso de Saioa y Alejandro, que trabajan en un campamento urbano de la Fundación Secretariado Gitano, en la que participaron como usuarios en su día. “Al principio se hace raro, porque estábamos acostumbrados a ser usuarios. Es el segundo año que participo como monitora y al principio el cambio fue enorme”, confiesa Saioa. “Está siendo una experiencia muy bonita”, añade Alejandro.

Los dos jóvenes de etnia gitana aprovechan e invierten así sus vacaciones de verano, antes de volver a las aulas, donde Saioa estudiará el segundo curso del Grado Superior en Gestión Administrativa en el Instituto Cuatrovientos y Alejandro cursará 2º de Bachillerato para después acceder a la universidad y empezar a estudiar Educación Física. En este aspecto Alejandro puntualiza que “me esta sirviendo para ver cómo será mi trabajo de profesor y para prepararme de cara al futuro, e ir cogiendo tablas educando a niños y niñas”, subraya.