BILBAO. El joven que ha quedado en libertad es el que fue identificado por la víctima ante la Ertzaintza por la ropa que vestía, y en el mismo momento de la detención la Ertzaintza comprobó que en su espalda sufría unos arañazos que le habría producido la joven al defenderse de la agresión.

Ahora la jueza ha dictaminado su puesta en libertad con las mismas condiciones cautelares que otros cuatro de los investigados, es decir, la obligación de comparecer diariamente en el juzgado.

De esta manera, el único de los seis investigados que permanece en prisión es el que fue claramente identificado por la víctima ante la Ertzaintza por un tatuaje de un búho muy visible en su cuello.

Con la excepción del acusado apodado "El Búho", el Juzgado sometió esta semana a ruedas de reconocimiento a los otros cinco investigados.

En la primera de esas ruedas de reconocimiento, celebrada el pasado martes y en la que participó el hoy liberado, la víctima únicamente identificó como uno de sus agresores, erróneamente, a un figurante no relacionado con el caso.

Al día siguiente, reconoció a tres de los investigados, aunque dos de ellos fueron grabados por cámaras de seguridad en otros puntos de la ciudad en el tramo horario en el que se produjo la agresión sexual.

Fuentes judiciales indicaron que los vídeos de seguridad descartan que estos dos investigados participaran en la agresión sexual, y la propia jueza del caso consideró en el auto que dictó el miércoles que "se les reconoce fácilmente en la imágenes" y "no parece posible" su presencia en el parque Etxebarria cuando se produjeron los hechos.

Los dos investigados, según revelan los vídeos aportados en las diligencias de la Ertzaintza, se encontraban moviéndose en la zona de las escaleras que dan acceso a la segunda planta del Mercado de la Ribera en el tiempo en el que se habría producido la agresión sexual grupal y posteriormente, entre las 22:00 y las 00:55 horas de la noche y madrugada del 1 al 2 de agosto.

El Ayuntamiento de Bilbao y la Asociación Clara Campoamor han anunciado su intención de personarse como acusación popular en el caso.