PAMPLONa - Agentes pertenecientes a la Guardia Civil de Navarra han incautado en fechas recientes más de 1.500 kilos de productos alimentarios que no habían pasado los pertinentes controles sanitarios que se exigen por parte de las autoridades para que sean comercializados. Los agentes del Servicio Fiscal de la Guardia Civil de Navarra, dentro de las labores de inspección que realizan por toda la Comunidad Foral, prestan especial atención a los pequeños comercios y empresas de distribución alimentaria. Con estos controles se evita que se introduzcan de forma ilegal alimentos en nuestro país, se evitan las fabricaciones clandestinas y la venta de productos en bares, restaurantes o pequeñas tiendas.

De los controles realizados en las últimas fechas cabe destacar uno llevado a cabo en el polígono industrial de Noáin en el que los agentes observaron una serie de productos que por su embalaje y sus inscripciones no cumplía con la normativa exigida en la Unión Europea, ya que el etiquetado no estaba en el idioma del país destinatario (en este caso el castellano), y se desconocía el lugar de origen del producto y/o el nombre del importador, “por lo que no habrían pasado los controles necesarios, siendo un peligro potencial para el consumidor final”, según explicó la Guardia Civil en una nota de prensa.

Estos artículos de alimentación, los cuales incumplían la norma general de etiquetado, presentación y publicidad, fueron inmovilizados por los agentes intervinientes, precediéndose a informar al Departamento de Salud del Gobierno de Navarra para las preceptivas actuaciones correspondientes. La cantidad total de productos intervenidos han sido 1.500 kilos, repartidos en 184 latas de refrescos, 881 kilogramos de dátiles, 320 kilogramos de cuscús y 18 litros de aceite de palma. - D.N.