pamplona - El TSJN ha confirmado en su integridad la sentencia de la Sección Primera de la Audiencia navarra que condenó a un agente de la Policía Nacional de Pamplona de 62 años, L.C.C., a un asesor J. L.G., de 53 y vecino de la capital navarra, y a J.L M.M. (el único en libertad), de 48 años y de Tierra Estella, a penas de 33, 24 y 14 años de cárcel respectivamente por corrupción y abusos a dos menores, de entre 14 y 15 años de edad, a los que conocieron en redes sociales y con los que mantuvieron relaciones a cambio de dinero o tabaco. Los condenados recurrieron la sentencia, alegaron que desconocían la edad real de los denunciantes y que estos aparecían en redes sociales como mayores de edad. En ello basada el policía su argumento, mientras que el asesor reconocía una de las relaciones y negó la otra, manifestó que fueron gratuitas y que desconocía su minoría de edad. El tercero negó la relación.

El TSJN desestimó sus alegaciones. Dice que “no podemos aceptar esta exculpación (la que hace referencia a que creían que eran mayores porque así lo ponían en internet) pues hoy en día es de común conocimiento que las redes sociales contienen datos irreales y ofrecen noticias falsas; por tanto, no deja de sorprender que personas de la edad y madurez de los procesados emprendiesen relaciones sexuales con jóvenes fiándose exclusivamente de la edad que reflejaban las plataformas de contactos”. Respecto a otra de las alegaciones, al hecho de que por su apariencia física no reflejaban su edad real, según los condenados, “la prueba pericial psicológica explicitó que la madurez y el aspecto de ambos jóvenes eran acordes a su edad”.

contactos frecuentes El TSJN ratifica la condena al agente de la Policía a 33 años de cárcel (delitos continuados de corrupción y abusos, además de revelación de secretos) y a pagar 20.000 euros a cada una de las dos víctimas. Este contactó por internet con uno de los menores en septiembre de 2016, cuando el chico tenía 14 años y su aspecto físico era coincidente con su edad. Así se conocieron y tuvieron relaciones y a cambio de ello el menor recibía dinero. La primera vez que se vieron la víctima dijo que tenía 18 años, pero ya en el segundo le contó que estudiaba en un colegio en la ESO y que tenía 15 años. Pese a ello, el procesado siguió manteniendo relaciones con el menor. Poco después le propuso traer a un amigo, otro menor de 16 años, cuyo aspecto físico también era coincidente con su edad. La edad de esta otra víctima la conoció el acusado al iniciar las relaciones, pero este procesado no solo abusó de ellos, sino que también les grabó, por lo que es condenado por revelación de secretos.

DEBIÓ SABER QUE ERA MENOR Al asesor J.L.G., que al igual que el policía está en prisión preventiva, le confirman la condena a 24 años por dos delitos de abusos (uno continuado) y dos de corrupción (uno continuado) y debe indemnizar con 20.000 euros a cada víctima. También contactó a través de una aplicación de internet con uno de los menores. Llegaron a quedar entre ocho y diez veces. El menor nunca le dijo que tuviera menos de 18 años, si bien le dijo que iba al colegio, y cuando se conocieron, el chico tenía 14 años y su aspecto físico era coincidente con esa edad, lo que unido a la reiteración en sucesivos encuentros le permitió conocer su edad, o en todo caso pudo y debió haber llevado al acusado a conocer que era menor de 16 años, razonó la Audiencia. Por último, el tercer acusado, condenado a 14 años por abusos a un menor, reconoció que no le cuadraba que la víctima se presentara como mayor en una red social, pero quedó con él varias veces en la estación de autobuses y cometió los abusos en descampados.