pamplona - La consejera de Salud, Santos Induráin, anunció ayer que el departamento "está dando los pasos previos para articular y desarrollar un convenio singular de vinculación para los centros de San Juan de Dios", cuyo contrato se encontraba en situación de enriquecimiento injusto desde el 31 de diciembre de 2016. Según explicó el director general de Salud, Carlos Artundo, este convenio es "un instrumento por el que se integra en la red pública sanitaria un determinado centro sanitario de acuerdo con la planificación sanitaria y que las necesidades de salud pública y/o asistenciales lo justifiquen", como así lo contempla la disposición adicional quinta de la Ley foral de contratos.
Como explicó la consejera en una comisión parlamentaria a petición de Navarra Suma para exponer la política del Ejecutivo en relación con el gasto en conciertos, se trata de una opción "que tiene sus complejidades", que no va a ser "un proceso corto, ni fácil", y en el que, "de alguna forma, abriremos camino con las singularidades de Navarra, pero pensamos que es una decisión que hay que tomar".
Tras reconocer que la situación de partida de los conciertos sanitarios "no es buena" y, de hecho, hay que darle una salida, consideró bueno "afrontar este asunto con una triple mirada", en la que se incluya "una apuesta de política sanitaria, una perspectiva global de planificación y una prioridad: la atención a la ciudadanía y resolver sus necesidades de salud". Así, Induráin expuso que la filosofía del departamento es "ofrecer con medios propios del Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea (SNS-O) la mayor parte de las prestaciones y de las atenciones sanitarias, de manera que sólo aquello que o bien estructuralmente o coyunturalmente no se llegue con medios propios es lo que se concertaría -refiriéndose así a contratos, conciertos sociales o convenios-", mediante las diferentes fórmulas legales "estableciendo todos los mecanismos que sean necesarios para controlar estos servicios" y su calidad.
La consejera señaló también que su primer reto es "sacar de la situación de enriquecimiento injusto en la que se encuentran ocho de los 16 conciertos principales" y añadió, al respecto, que "a lo largo del año 2020 vamos a poder acabar con el enriquecimiento injusto o, al menos, poner las bases para hacerlo". Además, para aumentar y mejorar los mecanismos de supervisión de los conciertos, han creado una unidad de control específica y prevén realizar "una revisión en profundidad de todos y cada uno de los conciertos vigentes".
Por su parte, la gran mayoría de los grupos se mostraron partidarios del convenio singular con el Hospital San Juan de Dios. Cristina Ibarrola, de Navarra Suma, reprochó a los partidos que sustentaban el Gobierno anterior que "demonicen los conciertos cuando los hacen otros y los utilicen cuando gobiernan lo mismo o más" y preguntó "cuánto supone de sobrecoste todos estos contratos sin renovar". La socialista Patricia Fanlo recordó que "Chivite defendió siempre el convenio singular con San Juan de Dios" y expresó la apuesta de su partido por "la sanidad pública, efectiva, de calidad y sostenible". Desde Geroa Bai, Ana Ansa comentó que "desde 2011 el gasto porcentual de los conciertos en sanidad se mantiene" y abogó por hacer "conciertos cuando se necesiten y revertirlos en cuanto se pueda". Txomin González (EH Bildu) apostó por la internalización de servicios y calificó de "desalentador que presten tantos contratos en situación de enriquecimiento injusto". - M. Pérez
Repaso a la situación. Tras reconocer que "el punto de partida no es bueno", el director general de Salud, Carlos Artundo, repasó "todos los conciertos y convenios" que tiene Osasunbidea y la gerencia de Salud Mental -un total de 18-, indicando el objeto del contrato, la fecha de finalización, la estimación del gasto, la situación actual y la solución propuesta.
Clínica Josefina Arregui de Alsasua. Prestación de asistencia sanitaria en régimen de hospitalización de corta o media estancia a pacientes psicogeriátricos que padecen síndromes demenciales o sospecha de deterioro cognitivo y presente una descompensación conductual con síntomas neuropsiquiátricos. El contrato, en situación de enriquecimiento injusto, finalizó el 31 de diciembre de 2018. La estimación de gasto es de 1.620.534 euros. Salud propone "planificar los recursos necesarios para este tipo de pacientes y hacer una distribución territorial de los mismos".
Resonancias magnéticas de Pamplona-Estella y Tudela. El contrato, en situación de enriquecimiento injusto, finalizó el 31 de diciembre de 2018. El gasto para el área de Pamplona-Estella es de 1.260.000 ? y de 334.600 ? para la de Tudela. Salud propone licitarlo previo estudio que lo justifique.
Terapias respiratorias a domicilio. El contrato finalizó el 31 de diciembre de 2017 y la estimación del gasto es 3.603.998 ?. La propuesta de Salud es licitarlo.
Transporte Sanitario. Como ya informó el departamento recientemente, el departamento prevé licitar todo el transporte, tanto urgente como no urgente, para toda Navarra. Tiene un gasto estimado de 15.198.300 euros.
Suministro y adaptación de audífonos infantiles. Este contrato finalizó el 31 de diciembre de 2017 y el gasto durante el último año, incluida la facturación de octubre, fue de 112.221 euros. Artundo señaló que "los productos que entran en el catálogo y están sometidos a precio máximo de financiación y está pendiente la orden foral sobre ortopedia".
Comunidad Terapéutica Ibarre Multzoa SAL. El contrato para tratar a personas con trastornos adictivos en régimen residencial (20 plazas) finalizó el 31 de diciembre de 2016. Con un gasto de 516.219 euros, el nuevo contrato ya está en tramitación.
Congregación Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón de Jesús. El contrato para residencia psiquiátrica asistida, residencia psicogeriátrica asistida y piso tutelado finalizó el 6 de noviembre de 2017 y el gasto es de 1.268.002 euros. El convenio se encuentra en tramitación por la ANADP-departamento de Derechos Sociales.
