- Mayo es el mejor mes para los hoteles y restaurantes con capacidad para celebraciones de eventos. La temporada alta se viene abajo y desde los distintos establecimientos tratan de recomponer un rompecabezas de fechas para dar cabida a todos en otra época del año. “El 99% busca otra fecha, el problema es encontrar la que les gusta”, comenta Antxon Elizalde, gerente del Hotel Don Carlos. Han tenido que aplazar una decena de bodas entre abril y mayo y tienen previstas casi una veintena en junio. “Están siendo unas semanas muy duras. Es un contratiempo importante, pero intentamos dar la mejor solución a cada pareja. Ofrecemos un plan B. La mayoría busca acomodo en otoño y otros pasan a los viernes de verano, siempre contando con que nos dejen celebrar bodas para entonces. Algunas parejas han preferido esperar al año que viene y no estar pendientes de la pandemia, y hay quien elige incluso domingo, como el 11 de octubre, ya que el 12 es fiesta...”. En este sector se une la cancelación de graduaciones y licenciaturas y el aplazamiento también de las comuniones, que compartirán fechas con las bodas.