- La Federación de asociaciones de directivos de centros educativos públicos, FEDADI, de la que forma parte la asociación de directoras y directores de instituto de Navarra (ADI), considera que las ventajas que ofrece la vuelta total o parcial, voluntaria u obligada, del alumnado a sus aulas “son nimias” en comparación con los “inconvenientes y riesgos que se afrontan”. En un comunicado, estas direcciones cree que este regreso, que en la Comunidad Foral se limita al alumnado de 2º de Bachillerato y tiene carácter voluntario, “puede desbaratar el enorme esfuerzo realizado por el profesorado para la atención no presencial de su alumnado, por tener que afrontar una ya imposible combinación de actuaciones presenciales y no presenciales”.

Esta federación, en la que está integrada la asociación ADI, que a su vez representa a todos los institutos de Secundaria y Formación Profesional de Navarra, lamenta “la falta de voluntad de consenso” por parte de las comunidades autónomas, donde han primado “intereses partidistas”, desvirtuando así la posibilidad de una solución adecuada para las necesidades del alumnado y, en general, de la comunidad educativa. En su opinión, el acuerdo general de que la repetición “debería ser muy excepcional” y de que “en la evaluación final tendría un peso fundamental el trabajo realizado presencialmente por el alumnado”, resulta “insuficiente” ya que supondrá que el alumnado de diferentes territorios “promocione y titule en condiciones distintas, situación que se agrava en 2º de Bachillerato”.

En cuanto al fin de curso, Fedadi reconoce que la solución mayoritaria va a ser la vuelta a las aulas en septiembre, siempre y cuando la pandemia lo permita, pero insiste en que desde la perspectiva de los centros, las ventajas de una vuelta parcial o total, voluntaria u obligada”, según automonías, del alumnado a las aulas “son nimias en comparación con los riesgos e inconvenientes que se afrontan”. En concreto, desde la asociación navarra consideran que “el aspecto sanitario es tan complejo que habrá que tener mucho cuidado”. “Si se hace en grupos pequeños guardando todas las garantías sanitarias, de forma voluntaria y sin renunciar al contacto telemático entre alumnado y profesorado, puede resultar asumible. Y beneficioso para el alumnado afectado por la llamada brecha digital. Pero todo dependerá de cómo se haga”, señalan.

En cuanto al próximo curso, la federación de asociaciones de direcciones de institutos piden que la planificación del nuevo curso se haga con corresponsabilidad, se aprenda de la experiencia de estas semanas y se tenga en cuenta a los equipos directivos de los centros. “Se deben priorizar la eliminación de las diferencias en el acceso a las tecnologías del aprendizaje y conocimiento, dotar a centros, profesionales y familias de recursos materiales así como de la formación necesarios”, remarcan.