- Tras abrir sus puertas al inicio de la fase 3 y con sólo turistas navarros, los campings de la Comunidad Foral se están preparando poco a poco para retomar su actividad de verano. Algunas ya cuentan con reservas para la temporada alta, y esperan que su ocupación aumente cuando se levante del estado de alarma y se abran las fronteras. Aún así, la presidenta de la Asociación de Hostelería de Navarra y responsable del Camping El Molino de Mendigorria, Ana Beriáin, adelantó que el sector contará con "un 35% de mercado anulado para este año", correspondiente al turismo internacional, ya que "ellos prevén sus vacaciones con bastante más antelación". En este aspecto, añadió que además, que el resto de los países europeos como Francia, Italia o Grecia han anunciado abrir fronteras a partir del 15 de junio, mientras que el Gobierno español ha anunciado que esa apertura se producirá a partir del 1 de julio.

En algunos casos, el turista internacional ya había reservado sus plazas, como en el caso del Camping Ezkaba. Según explicaron sus responsables, Arantxa y Yolanda Calvera, "para Sanfermines trabajamos con empresas que vienen de Australia y todo eso se canceló en el primer momento que empezó a brotar el coronavirus antes del confinamiento".

A pesar de la rareza de la situación, la incertidumbre generada por la crisis sanitaria, y de la necesidad de implementar medidas y protocolos contra el covid-19, el sector ya lleva varias semanas trabajando pero, según explicaron las responsables del camping de Ezkaba, "las reservas todavía son esporádicas y suelen ser cara al fin de semana". Por lo demás, aunque reciben consultas sobre la disponibilidad en distintas fechas, el ritmo de reservas está algo "parado" en todo el sector.

En el Camping Iratxe de Ayegui la situación es similar, ya que el 80% de su clientela procede de la CAV. Ahora tienen clientes navarros que "antes igual no habían venido a nuestro camping y que en este momento, como tampoco pueden viajar a otras provincias, pasan el fin de semana en el camping, en auto caravana o en bungaló", explicó el responsable del recinto, Iñigo Vicente. Aún así, puntualizó que aún les falta "ese cliente que venga a pasar toda la semana para disfrutar de sus vacaciones". Por otro lado, añadió que las anulaciones y las reservas se van solapando. En el caso de las cancelaciones, aclaró que "en todo momento se devuelve la reserva íntegra porque es una situación excepcional".

En cuanto a la ocupación, Vicente adelantó que en la actualidad "tendremos una ocupación en bungalós y parcelas de un 60% a partir del 20 de julio hasta final de agosto. Pero otros años en estas fechas, ya no habría nada para reservar en agosto".

Además de alterar el ritmo de las reservas, la crisis sanitaria también ha repercutido en el uso y la distribución de distintos espacios. Por ello, el sector ha tenido que establecer una serie de medidas y protocolos para velar por la salud de los usuarios y del personal. En este punto, Beriáin subrayó que "lo principal es la seguridad de nuestro equipo y de nuestros clientes" y añadió que el camping ha organizado "cursos de formación para todos nuestros trabajadores para que todo el mundo conozca y sepa como tiene que actuar y cómo aplicar el protocolo. Lo principal es la seguridad para nuestro equipo y para nuestros clientes".

Entre las nuevas medidas de higiene, Vicente expresó que han tenido que reforzar la limpieza con nuevos productos. En el caso de las zonas comunes, como los baños, las duchas o los lavabos, el proceso de desinfección se debe realizar menos seis veces al día. Para ello, "se cierra el edificio, entra el equipo de limpieza, hace la limpieza como siempre, con más subproductos y dilucida", explicó. Una vez finalizada esta primera tanda de higienización, "entra otro equipo de limpieza con un pulverizador que contiene un producto lleva dilucida, agua y muy poca lejía. Y esa permite que durante seis-ocho horas la zona permanezca limpio de virus".

En el caso del Camping Ezkaba, se han establecido geles en cada punto del parque, de los lavaderos, los aseos, y la entrada de la recepción. Además, todo el recinto cuenta con señales que recuerdan que hay que mantener los dos metros de distancia. Por otro lado, según explicaron desde las instalaciones, procurarán que "todas las reservas sean vía online, para que la gente no tenga que hacer cola si no es preciso". Además, tienen cajas de seguridad "para que la gente pueda recoger su llave y si quiere hacer la reserva de un bungaló, podemos dejar la llave también fuera".

Para limitar el aforo de la recepción, el Camping El Molino de Mendigorria ha habilitado un número de teléfono "diferente al del recinto para poder comunicarte con recepción una vez que estás alojado y evitar viajes", aclaró.

La limitación de aforo también perjudica durante esta fase a las piscinas de los campings. "En este momento estamos con un 30% de aforo, que es lo que marca el Gobierno central de Madrid", explicó Beriáin y añadió que espera que "al final de la desescalada ya no haya limitación de aforo". Aún así, adelantó que las medidas de distanciamiento y los protocolos de limpieza e higienización se seguirán aplicando durante todo el verano.

"Hemos formado a nuestros trabajadores para que sepan cómo aplicar el protocolo"

Responsable del Camping El Molino

"Aún nos falta el cliente que venga a pasar toda la semana para disfrutar de sus vacaciones"

Responsable del Camping Irache

"Las reservas todavía son esporádicas y suelen ser para escapadas durante fin de semana"

Responsables del Camping Ezkaba