- Cuatro nuevos ejemplares jóvenes de quebrantahuesos, nacidos entre marzo y abril, han logrado volar y dejar el nido a finales de este verano en Navarra, lo que se considera un éxito en la reproducción de esta rapaz. El quebrantahuesos ya ocupa en Navarra nueve territorios de cría, incluido Aralar, lo que confirma su expansión desde el Pirineo hacia el oeste peninsular.

Esta temporada, la Comunidad Foral ha conseguido un récord de productividad en la cría del quebrantahuesos desde que se tienen registros (año 1980) y también en los pollos que han logrado volar, ya que la cifra más elevada era de tres en 2015.

El departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente lleva a cabo el seguimiento de esta población y en la temporada 2019-2020 ha constatado que son ya nueve los territorios ocupados en Navarra por esta especie, uno más que en las anteriores, dato considera como un indicio de la expansión territorial de la especie, que tiene en esta comunidad su límite meridional de distribución en el pre Pirineo. Navarra cuenta con la tercera población de quebrantahuesos en el sur del Pirineo, muy por detrás de Huesca y Lleida, pero sin embargo, el 6,3% de la población de todo el país, aunque su presencia en la Comunidad Foral se considera esencial por constituir el corredor natural para la expansión de la especie hacia las zonas montañosas del norte de España.

La supervivencia del quebrantahuesos se basa en compensar su baja tasa de reproducción con una larga esperanza de vida.

Kiriku, macho nacido en 2006 en el territorio de Arbaiun, se territorializó en Aralar hacia 2012, cuando alcanzó la edad adulta. En 2017 se emparejó, esta vez formado un trío cooperativo con otro macho y una hembra, Muel, marcada en Aragón en 2016 a la edad de 6 años y en 2019, la hembra realizó la primera puesta que fracasó durante la incubación. Ha sido en esta última temporada cuando el pollo llegó a nacer, pero un derrumbe del nido ha impedido que llegara a volar.

Actualmente, apenas en el 30% de los territorios ocupados en Pirineos se concluye la reproducción y por eso este año se puede considerar un éxito, ya que 7 de los 9 territorios ocupados en Navarra han hecho puesta y 4 pollos han logrado volar.