- Carlos Ibero Esparza, el médico coordinador de la atención a las plantas covid-19 en el Complejo Hospitalario de Navarra, reconoció ayer que la amenaza de la pandemia se fue acercando poco a poco y recordó aquellos primeros días en los que los sanitarios estaban más concienciados de que era posible una crisis sanitaria, pero que "en el ambiente era algo más hipotético". "Nos habíamos ido preparando en varios escenarios: con la gripe A, el ébola, las fiebres hemorrágicas y con otros virus respiratorios. Veíamos el peligro antes. Los sanitarios estábamos preparados para una crisis sanitaria corta pero no para una catástrofe mantenida en el tiempo", explicó Ibero. Por ello, relató que cuando el coronavirus empezó a golpear con dureza a la sociedad "no sabíamos cómo íbamos a responder, nos fuimos adaptando con las herramientas que teníamos y seguimos adaptándonos".

De los tres elegidos para recoger la Medalla de Oro de Navarra, Ibero fue al que más emocionado se le vio en su discurso tras recibir la distinción de manos de la presidenta del Gobierno foral, María Chivite. Tras un emotivo vídeo en el que salían personas que habían pasado la covid-19, Ibero echó la vista atrás y recordó el esfuerzo y el trabajo que todos los profesionales sanitarios han tenido que realizar durante todos estos duros meses.

Hubo un momento en que la emoción le pudo y tuvo que hacer una pausa que fue seguida de un enorme aplauso de los asistentes al acto en el Salón del Trono del Palacio de Navarra. "Me he emocionado mucho porque el discurso era desde el sentimiento de los profesionales sanitarios. Además, el vídeo que nos han puesto nos llega y la verdad que no lo esperaba. He reconocido a gente lo que se ha sumado a que el discurso era sentido. Uno se muestra abierto en estos escenarios", expuso Ibero, minutos después en declaraciones a los periodistas, en las que reconoció estar "más tranquilo".

"Me he emocionado mucho porque el discurso era desde el sentimiento de los sanitarios"

Coordinador de las plantas covid del CHN