El pasado 27 de marzo fue sin duda un gran día para 13.638 médicos de todo el Estado que se jugaron su futuro, una plaza y un destino formativo dentro Sistema Nacional de Salud. Para Uxue Izpura Bueno, pamplonesa de 25 años, terminar el examen MIR (Médico Interno Residente) fue la guinda para seis años de estudio incesante y la oportunidad para recuperar su vida social, que tuvo que dejar aparcada para conseguir una de las 7.989 plazas ofertadas este año por el Ministerio de Sanidad. Y desde luego que lo hizo, nada más y nada menos que posicionándose en el número 4 del MIR 2021.

¿Cuándo supo que quería estudiar Medicina?, ¿es algo que tuvo en cuenta en sus estudios de Secundaria y Bachillerato?

-No supe que quería estudiar Medicina hasta segundo de Bachillerato. Desde secundaria tuve claro que me gustaban las ciencias, supongo que se debe en gran parte a que se me daban bien. Así que, siguiendo un poco las asignaturas que me gustaban, hice el Bachillerato de ciencias de la salud y estuve dudando entre las carreras de Enfermería, Farmacia, Bioquímica y Medicina. Al final me decidí por Medicina y, de momento, no me he arrepentido.

¿Qué es lo que le llevó a estudiar Medicina?

-Cuando tuvimos que decidir los estudios que queríamos realizar, estuve mirando las asignaturas de los diferentes grados. Ver sobre que trataba cada signatura me ayudaba a saber si me apetecía estudiarlo. Al ver las materias del grado de Medicina me apetecía saber más sobre ellas, así que me dejé llevar. También influyó en ello una amiga del conservatorio que, estando yo en 2º de Bachillerato, ella cursaba 1º de Medicina y los libros que me enseñaba llamaron mucho mi atención.

¿Cómo han sido los años de carrera?

-Han sido 6 años duros, sobre todo en temporada de exámenes, pero también muy bonitos. A pesar de ello nunca me he planteado abandonar. El único momento de “duda” con la carrera ha sido este año en el que me he llegado a plantear si merecía la pena tanto estudio y, aunque aún no haya empezado a trabajar, creo que sí, que merecerá la pena.

Si estudiar para el MIR ya es una tarea cuanto menos complicada, además se le juntó el confinamiento... ¿Cómo fue estudiar en aquellas circunstancias?

-La verdad es que en el día a día a lo mejor no se notaba tanto, pero los domingos, que era nuestro día de descanso, el hecho de no poder reunirte con amigos en casa o el cierre de la hostelería nos condicionaba bastante. Aunque, personalmente, lo más duro fue el autoconfinamiento que tuvimos que realizar los aspirantes al MIR semanas antes de la prueba ante la falta de alternativas para realizar el examen en caso de ser contacto estrecho de un positivo o de tener covid. Después de un año estudiando, pensar que por algo así tendríamos que repetir el examen era algo que me preocupaba.

¿Ha cambiado la pandemia su visión sobre el papel de la medicina en la sociedad actual?

-Ha cambiado en el sentido de que tenemos que darle la importancia que merece, tenemos un sistema sanitario muy bueno y merece la pena invertir en él.

Teniendo en cuenta que ha obtenido la cuarta mayor calificación en el MIR, ¿se esperaba posicionarse tan alto?

-Es algo que nunca te esperas. Una prueba con tanta gente y tan bien preparada no solo depende de las horas que estudies o del conocimiento que tengas. Y al verlo no me lo podía creer, lo miré varias veces por si lo había leído mal pero así era. Lo celebré con mi familia y mis amigos que se alegraron mucho al saberlo a la par que se sorprendieron. Algunas amigas creían que les estaba tomando el pelo.

¿Qué especialidad elegirá y en qué centro?

-Ahora mismo me decanto más por la Pediatría, aunque he dudado con Medicina Interna y Nefrología. Me parece una especialidad muy completa porque no se centra en un solo órgano o sistema, pero en caso de así desearlo existen muchas subespecialidades. Además, yo todavía no tengo claro en que ámbito quiero trabajar ya que tanto el hospital como el centro de salud me gustan, y la Pediatría me da la oportunidad de ambas. Por otro lado, al estar en prácticas de Pediatría me di cuenta de que el trabajar con niños me gustaba mucho. En cuanto al centro no lo tengo muy claro, por un lado, es una buena oportunidad para conocer otra ciudad y por otro he tenido muy buena experiencia en los centros de pamplona, pero aun tengo tiempo para pensarlo.

¿Cómo ve su futuro a corto plazo?

-De momento me gustaría organizar algún viaje con los amigos y con mi pareja en cuanto las restricciones lo permitan para así recuperar el tiempo invertido estudiando. Y más a largo plazo espero estar feliz trabajando, intentando formarme lo mejor posible.

¿Qué le diría a aquellos estudiantes que tendrán que enfrentarse al MIR?, ¿algún consejo para hacerlo más llevadero?

-A mi me ha servido no presionarme demasiado porque eso hizo que fuera más relajada al examen. Pero cada uno tiene que conocerse, ver que es lo que mas le ayuda y apoyarse en ello.