- En base a la atención en el servicio de Urgencias y a falta de sumar los datos del área de Tudela, en el primer cuatrimestre de este año se han atendido 84 casos de intento autolítico en un total de 69 pacientes distintos, lo que significa que se ha registrado un intento cada dos días. Así lo expuso ayer Salud Mental en la comisión interinstitucional de coordinación para la prevención y atención de las conductas suicidas de Navarra. Una reunión en la que, además, presentaron la guía de buenas prácticas policiales ante conductas suicidas de la Comunidad Foral.

Según indicó el Gobierno foral en una nota de prensa, la cifra de 84 casos en el primer cuatrimestre supone que en Navarra se han producido, hasta comienzos de mayo, 0,5 intentos al día y 15,3 al mes. Estos datos, según indicó el Ejecutivo, complementan los presentados en la pasada reunión del órgano, relativos a los totales del año 2020, cuyo número se mantenía estable con respecto a 2019. En ese año, en 2019, se registraron en la Comunidad Foral un total de 45 suicidios (34 hombres y 11 mujeres), mientras que en 2020 la cifra bajó a 43 (31 hombres y 12 mujeres). Los meses que siguieron al confinamiento, en el que apenas se contabilizaron suicidios -4-, fue la época más complicada, al registrarse 16 suicidios en junio y julio; 8 cada mes.

Respecto a la guía de buenas prácticas policiales ante conductas suicidas, se trata de un documento amplio desarrollado por el grupo de trabajo conformado por Policía Foral, Guardia Civil y Policía Nacional, creado a instancias de la comisión. El manual, colaborativo e integrado, está concebido como un instrumento de referencia complementario a los procedimientos o instrucciones de los que los cuerpos policiales y servicios de emergencias en general disponen en esta materia. Esta guía, en concreto, aborda la problemática "desde tres líneas estratégicas: prevención, que engloba la formación, los puntos de contacto y mediación y la interacción constante entre policía, asociaciones y recursos preventivos; intervención, cómo proceder de forma sinérgica ante una tentativa de suicido en marcha o un hecho consumado; y posvención, relativa a la contribución al cierre o duelo de un hecho con alto impacto emocional en el círculo familiar y social de la víctima", indicaron.

El objetivo de este manual de buenas prácticas, según explicó el Ejecutivo, es armonizar herramientas multidisciplinares que faciliten la prevención e intervención ante el suicidio, también en la agenda global de salud pública y en las políticas públicas, incidiendo en la concienciación y su relevancia como cuestión de salud pública. Asimismo, esta guía se ha desarrollado con la vocación de que pueda ser desplegada también en las Policías Locales de Navarra, cuerpos que desempeñan un papel fundamental en la atención de conductas suicidas en sus distintas variables.

Por otra parte, la comisión constató el papel vital que Atención Primaria desempeña en la vigilancia y cuidado más estrecho de las personas en riesgo y sus familiares, motivo por el que se pretende mejorar la integración, para lo que también se incluirá a partir de ahora a este nivel sanitario en esta comisión interinstitucional. Así, el grupo volverá a reunirse antes del verano para continuar con sus trabajos.

12.799

Desde el inicio del estado de alarma, el 14 de marzo de 2020, el Teléfono de la Esperanza atendió en Navarra 12.799 llamadas asociadas a problemas psicológicos, 407 de ellas con ideación de suicidio, 58 con crisis suicida y 14 con acto suicida en curso.

Reunión. La comisión interinstitucional de coordinación para la prevención y atención de las conductas suicidas de Navarra, constituida en 2014, está presidida por Carlos Artundo y forman parte de ella como vocales representantes de los departamentos de Salud, Políticas Sociales y Educación, la Policía Foral, el Teléfono de la Esperanza, el Instituto Navarro de Medicina Legal, la Agencia Navarra de Emergencia, la Asociación de Periodistas y la Asociación Besarkada. En el encuentro participaron como invitados representantes de la Policía Nacional y la Guardia Civil, dos profesionales de psiquiatría y psicología, y una educadora social y activista.