La ministra de Sanidad, Carolina Darias, anunció ayer que desde este jueves las comunidades podrán empezar a inocular la dosis adicional de la vacuna contra el covid-19 a personas en “situación de grave inmunosupresión” tras ser aprobada esta medida en la reunión de la Comisión Interterritorial de Salud. Así lo dijo Darias al término de la reunión, en la que recordó que esta dosis adicional está indicada para personas con trasplante de órgano sólido (se estima que hay unas 60.000 en el Estado), receptores de trasplante de progenitores hematopoyéticos (alrededor de 20.000) y enfermos en tratamiento con determinados fármacos, lo que sumaría un total de unos 100.000 pacientes.
Según la ministra, serán las comunidades las que determinen qué pacientes recibirán el suero adicional y se pondrán en contacto con ellos, porque son quienes los tienen identificados. En estos casos las dosis adicionales se harían con vacunas de ARN mensajero -Pfizer o Moderna- y preferiblemente se administrará el mismo tipo de vacuna que la recibida con anterioridad. Sobre la estrategia de vacunación, Darias manifestó que inicia una nueva etapa tras anunciarse la dosis adicional a los pacientes más inmunodeprimidos y añadió que la ponencia de vacunas evaluará la próxima semana, tras analizar la evidencia científica, la conveniencia de ampliar la inoculación de este suero adicional a este colectivo.
Por su parte, asociaciones científico-médicas de España reclamaron la inclusión de las alrededor de 28.000 personas en programa de hemodiálisis entre los pacientes inmunodeprimidos, a los que se administrará la tercera dosis de la vacuna. En un comunicado, la Facme (Federación de Asociaciones Científico Médicas de España), que agrupa a 46 sociedades, recordó que esta era una de las recomendaciones que remitió al Ministerio de Sanidad y que fueron posteriormente enviadas a la Ponencia de Vacunas para su consideración.
La Facme aplaude que el resto de recomendaciones emitidas hayan sido consideradas por la Comisión de Salud Pública para la administración de una dosis extra, q. Además, las asociaciones reclaman que se organice la vacunación en el marco asistencial en que están estos pacientes para mejorar las garantías para su identificación correcta y darles una información médica ajustada al contexto de su situación, teniendo en cuenta además la relación temporal de la inmunosupresión con la vacunación.
También seguirá evaluando el conocimiento científico y emitiendo futuras revisiones de estas recomendaciones, que podrían incluir, entre otros a “pacientes oncológicos en tratamiento citotóxico, pacientes oncohematológicos y pacientes tratados con inmunosupresores tales como micofenolato, abatacept o corticoides mantenidos a dosis altas”.
