- El temporal dejó ayer imágenes poco habituales de crecidas de los ríos de la Merindad de Sangüesa. A causa del desbordamiento de los ríos varias carreteras de la red viaria del Pirineo tuvieron cierres parciales y temporales durante el día. Ayer a última hora todas las carreteras habían vuelto a abrir, a excepción de la carretera que une Navarra con Aragón (NA-137) desde Burgi a Salvatierra de Esca.

Durante la jornada, en total, seis carreteras tuvieron que ser cerradas al tráfico temporalmente debido a inundaciones. Una de las más afectadas fue la carretera entre Otsagabia y Ezcároz (NA-140), por grandes balsas en la carretera, que dificultaban la circulación y se recomendaba precaución al volante. Durante la mañana también estuvo cortada la carretera Navascués-Lumbier (NA-178), pero en torno a las 13.00 horas se reabrió permitiendo la circulación más directa con el valle de Roncal. Otras carreteras que padecieron cierres fueron la de Erro-Pamplona (N-135), la que discurre entre Olaldea y Oroz-Betelu (NA-2040), Carretera Aribe- Orbaizeta (NA-2030), todas ellas también por inundaciones.

La Policía Foral, llamó a la precaución también en la carretera N-121, que tuvo cortada la salida a Pamplona a la altura de Egozkue. En Zurian, un carril de la N-135 estuvo también cortado.

A pesar de que el río Esca no había sobrepasado el cauce, la alcaldesa de Roncal, Amparo Viñuales, sí mostraba preocupación por alguna cantidad de agua que había entrado en el polideportivo municipal. "Ha pasado por los sumideros, que están más bajos, pero mañana (por hoy) veremos cuántos daños hay", reflejó. La alcaldesa, como gran parte del valle, también estaba inquieta por las precipitaciones caídas en Belagua durante las últimas horas. A última hora de ayer, expresaba Viñuales, esas precipitaciones eran de nieve y no agua, algo que reduciría su efecto en el aumento de los ríos.

A diferencia de zonas de la Comarca de Pamplona, en el Pirineo no se registraron cortes de electricidad. "El jueves sí que estuvimos un rato sin luz pero hoy (por ayer) no se ha ido y hemos tenido buena cobertura de teléfono", expresó.

En otras localidades de la Merindad de Sangüesa también se registraron importantes desbordamientos de los ríos. En Lumbier, por ejemplo, la unión de los ríos Irati y Salazar aumentó muy altamente el caudal en la entrada a la Foz de Lumbier. También se anegaron las zonas de huertas de la localidad.