El productor de televisión José Luis Moreno ha negado este jueves en su declaración como imputado en la Audiencia Nacional cualquier ilegalidad en relación con la presunta macroestafa que se investiga en la 'Operación Titella', asegurando que no es "capo" de nada, sino un empresario con una larga trayectoria.

No soy "capo" de nada, ha dicho al ser preguntado por su defensa al principio de su interrogatorio ante el titular del Juzgado Central de Instrucción Número 2, Ismael Moreno, según fuentes jurídicas consultadas por Europa Press.

"¿Tengo yo pinta de capo?", ha remachado, al ser preguntado por los periodistas a su salida de la Audiencia Nacional, donde ha estado declarando unas tres horas y de donde se ha despedido entonando la canción 'Contigo aprendí'.

En su breve declaración a los medios de comunicación, ha defendido su inocencia, ha expresado su confianza en la Justicia y ha avanzado que en dos semanas dará una rueda de prensa en la que contestará a todas las preguntas.

Los investigadores señalan a Moreno como el presunto cabecilla de una organización criminal que desde 2017 se habría dedicado a estafar a entidades bancarias e inversores privados, por un lado, y a "la falsificación de efectos bancarios como cheques y pagarés" y al "blanqueo de capitales" usando para ello un entramado empresarial, por otro.

No obstante, Moreno ha negado en su comparecencia judicial que usara testaferros. "No puedo soportalos", habría contestado, de acuerdo con dichas fuentes, para reivindicar que a lo largo de su carrera ha realizado más de 3.000 producciones que se han traducido en 150 millones de euros en contratos firmados.

En consecuencia, se ha desvinculado de algunas de las sociedades cuestionadas por los investigadores. De Youmore, por ejemplo, ha acotado que, aunque es su "bebé" porque en su momento fue el único que vio futuro a una plataforma de vídeos por Internet, no es accionista.

LA SUPUESTA ESTAFA A ROEMMERS, UN "BULO"

Asimismo, se ha referido a la producción de la serie sobre la vida de San Francisco de Asís, 'Glow & Darkness', para rechazar igualmente que estafara al empresario argentino Alejandro Roemmers, con el que se asoció para materializarla, y al que ha definido como una persona estupenda y un gran escritor que hasta se merece el premio Nobel.

Eso es un "bulo", ha afirmado sobre la presunta estafa a Roemmers, recalcando que la Audiencia Nacional tiene en su poder desde hace meses los 1.900 minutos grabados, que equivalen a unos 35 capítulos, algunos de los cuales se ha ofrecido a mostrar durante la anunciada rueda de prensa.

Moreno ha indicado que hasta el propio Roemmers se dio cuenta durante un viaje que hicieron en el contexto de la grabación de 'Glow & Darkness' de que los 35 millones de euros que había invertido en la sociedad conjunta, Dreamlight, podían no ser suficiente para hacer frente a una producción tan ambiciosa.

De hecho, ha detallado que el empresario argentino observó que los precios de producciones similares eran más altos, lo que le generó inquietud, por lo que Moreno propuso una auditoría. Hubo dos peritos, uno por parte de Roemmers y otro por parte del ventrílocuo porque, según ha expuesto, el inversor es buena persona pero muy influenciable. De esas periciales quedó claro que el valor de la producción era muy superior al dinero inyectado: más de 250 millones.

La otrora estrella televisiva también ha rechazado irregularidades en los pagos efectuados a Dreamlight. De acuerdo con su versión, no se desembolsaba ni un euro sin que el equipo de Roemmers diera el visto bueno. Había hasta tres 'controllers', ha subrayado.

Además, ha sostenido que el gasto de la serie era real. En este sentido, ha precisado que solo en 'atrezzo' y vestuario pudieron irse unos 6 millones y que los actores habrían costado otros 11 millones, a lo que ha añadido que hay servicios que no ha cobrado, aunque ha apostillado que no le importaba porque estaba demasiado implicado en el proyecto como para contar las horas extra.

Con todo, ha apuntado que en su momento Roemmers solamente se quejó de algún retraso en la salida de los primero capítulos, si bien mostrándose consciente de los problemas provocados por la pandemia de coronavirus y por otras vicisitudes, como la desaparición del actor que hacía de San Francisco de Asís. Según Moreno, el empresario argentino le trasladó que la serie estaba quedando tan bien que no debía preocupara por los tiempos.

MORDIDA, UNA SERIE DE TELEVISIÓN Y NO UNA COMISIÓN ILEGAL.

También ha hablado de otra serie: aquimandoyo.com. Según las citadas fuentes, Moreno ha reconocido que habló con Fernando López Puig, un "histórico" de la televisión pública, para cerrar el proyecto pero ha dejado claro que no hubo trato de favor. Para sostener su tesis, ha recordado que fue cancelada.

Igualmente se le ha interrogado sobre una anotación de sus agendas personales que recogió la Guardia Civil en un informe. 'Cerrar contrato director y mordida', podía leerse. Aquí, se ha mostrado sorprendido de que esos dos conceptos apareciesen juntos en sus notas.

Moreno ha explicado que no se refería a una supuesta comisión ilegal, sino que con 'mordida' estaba aludiendo a otra serie cuyo guión ya tenía preparado y que versaba sobre un hombre que amasó una fortuna adjudicándose 'mordidas'.

SE DESMARCA DE AGUILERA

Por otro lado, ha marcado distancias respecto a Antonio Aguilera, al que el sumario perfila como otro de los presuntos cabecillas de 'Titella' que se habría encargado de idear el enjambre societario que después presentarían a los bancos para captar financiación para los supuestos proyectos.

Sin embargo, Moreno le ha descrito como un inversor más, concretando que le dio dinero para financiar 'Reinas', una serie comprada por TVE que también se acabó cancelando.

Moreno ha aseverado que desconocía que los fondos procedentes de Aguilera eran sospechosos y que, de haberlo sabido, no habría hecho negocios con él a fin de evitar el "linchamiento" del que ahora se siente víctima.

El ventrílocuo ha querido aclarar que no buscó ni a Roemmers ni a Aguilera, a pesar de que tuvo que rastrear inversores privados porque ya no encontraba financiación bancaria debido a sus deudas con Hacienda.

En este punto, ha hecho hincapié en que su patrimonio es muy superior a su deuda con el fisco, la cual ha destacado que se ha reducido desde los 5 millones de 2018 a los más de 3 millones actuales. Y, ha ahondado, si Roemmers pagara los 500.000 euros que, según Moreno, le corresponden, sería aún menor.

Ha defendido que no tiene dinero oculto en el extranjero, razonando que si así fuera ya habría saldado cuentas con la Agencia Tributaria. Sus situación sería tan precaria, ha ilustrado, que sus hermanos le mantienen en el día a día. "Y estoy orgulloso", ha comentado después con la prensa.

VIAJES A MALDIVAS Y GRABACIONES DE SUBMARINISMO

Moreno también ha habido del Maldives Crown, el barco de lujo que, según el informe de la Guardia Civil, habría sido adquirido por Hassan Shareef gracias a un préstamo de 2,7 millones de dólares concedido el productor de televisión.

Sin embargo, ha negado haber dispuesto de ese dinero y ha especificado que se prestaron 300.000 euros de los que solo le fueron devueltos 70.000. Sus viajes a las paradisíacas islas, ha comentado, también tuvieron como objetivo la realización de vídeos relacionados con el submarinismo.

En cuanto a la casa de Praga comprada por Youmore, y por la que ya declaró su examigo íntimo Martin Czehmester, Moreno ha respondido quería tener sedes de la empresa en distintas ciudades donde poder cerrar negocios relacionados con Internet.