La Fiscalía Superior de Navarra reclama siete años de prisión a Juan Miguel I.B., de 44 años y vecino de Urdax, autor del atropello mortal a finales de mayo a un ciclista francés de 31 años que falleció en la carretera N-121-B en el término municipal de Baztan.

El conductor, que se encuentra en prisión provisional, está acusado de un delito de homicidio por imprudencia grave en concurso con un delito de conducción bajo la influencia del alcohol y drogas, por el que le piden cuatro años de cárcel, así como de otro delito de abandono del lugar del accidente, por el que le solicitan tres años de prisión. Además, el Ministerio Público pide que se le prive del permiso de conducir vehículos a motor durante diez años. El juicio será en las próximas semanas en un juzgado de lo Penal de la capital navarra.

Cervezas y anfetaminas

La Fiscalía recuerda que “sobre las 16.20 horas del 30 de mayo de 2021, el acusado conducía el vehículo de su propiedad por la N-121-B (Pamplona-Francia por Baztan) en sentido Pamplona. Por la misma vía, pero en sentido Francia, circulaba la víctima, de 31 años, en bici y portando un casco protector. En el escrito de acusación se relata que el acusado no había ingerido alimento alguno después de haber desayunado a las 10.00 horas y de haber consumido varias cervezas y anfetaminas, conduciendo bajo la influencia de las mismas.

A consecuencia de dicha ingesta y obviando las más elementales normas de la circulación, el acusado, a la altura del km.69,4, invadió la calzada del sentido contrario, interfiriendo en la trayectoria del ciclista, colisionando la bicicleta y el turismo. La víctima, que no pudo hacer nada por evitar la colisión al tratarse de una zona de curvas que le impidió ver al turismo del acusado circulando por su carril, cayó sobre el turismo golpeando con su cuerpo el lado derecho de la luna delantera y techo del turismo, siendo proyectado contra el asfalto. El ciclista resultó gravemente herido, falleciendo entre las 15.00 y las 17.00 horas del mismo día.

Huyó, aparcó en un camino y siguió a pie

Tras la colisión, el acusado, pese a ser consciente de que había atropellado a un ciclista, no paró su vehículo, ni llamó a los servicios de emergencia, abandonando el lugar a bordo de su vehículo a gran velocidad, introduciéndose pocos kilómetros después en una pista forestal donde estacionó su turismo y se marchó andando hasta su domicilio en Urdax.

No se ha podido determinar a la velocidad a la que circulaba el procesado, en una zona limitada a 90 km/hora. Por su parte, el ciclista fallecido circulaba a 29 km/h. El siniestro se produjo en horario diurno, con buen tiempo y sin problemas de visibilidad.

Sobre las 19.15 horas, el acusado fue localizad por la Policía Foral en su domicilio, donde arrojó un resultado positivo en alcohol de 0,64 mg/litro de aire espirado a las 20.07 horas, así como positivo en anfetamina. Presentaba sintomatología de hallarse bajo los efectos de las sustancias consumidas, con olor a alcohol en el aliento, habla pastosa e incoherente, desorientación temporal y espacial y ojos brillantes.