Los ministros de Exteriores de la Unión Europea han acordado este lunes ayudar a las Fiscalías de la Corte Penal Internacional (CPI) y de Ucrania a documentar posibles crímenes de guerra cometidos por tropas rusas en ese país, mientras continúan el debate sobre ampliar las sanciones al gas y el petróleo rusos, de los que la UE aún depende. Los ministros comunitarios han abordado la guerra en Ucrania y, antes de iniciar su reunión mensual, han celebrado un desayuno de trabajo con el fiscal jefe de la CPI, Karim Khan, que ya ha decidido abrir una investigación sobre lo ocurrido en ese país, y también por videoconferencia con el fiscal general ucraniano.

"Apoyaremos a ambos fiscales financieramente y con nuestro equipo sobre el terreno", ha anunciado en una rueda de prensa tras el Consejo el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, quien ha dejado claro que no excluyen sancionar al gas y el petróleo rusos, aunque este lunes no se ha tomado ningún acuerdo al respecto. En primer lugar han hablado de "cómo hacer a Rusia responsable de las crasas violaciones de la ley internacional", según Borrell, quien asegura que "proporcionaremos asistencia a la hora de documentar los crímenes de guerra". El político español visitó la semana pasada junto a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, Kiev, donde se reunieron con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, y Bucha, escenario de una masacre de civiles.

Borrell ha informado sobre su viaje a los ministros europeos, que han acordado también el despliegue de la misión de asesoramiento que la UE tenía en Ucrania antes de la guerra y que ahora cooperará con su Fiscalía. Afirmaó que ataques como el cometido el viernes contra una estación en Kramatorsk (este de Ucrania), que dejó decenas de muertos, "no es hacer la guerra, es una actividad criminal". Borrell explica que el aumento propuesto en otros 500 millones de euros procedentes de fondos europeos para financiar armas para los ucranianos aún debe culminar su procedimiento legislativo en los Parlamentos de algunos Estados miembros, pero que cuando esto ocurra la UE habrá dedicado 1.500 millones para ese fin.

En cualquier caso, a ese montante se suman los gastos que muchos Estados miembros han añadido por su cuenta, "algunos más de 300 millones de euros"; otros, "más de un tercio de su presupuesto de defensa". El alto representante adiverte de que, tras la retirada de las tropas rusas de las inmediaciones de Kiev, se preparan ahora para "lanzar una gran ofensiva" en la región oriental ucraniana del Donbás. "Estamos dispuestos a seguir respaldando a Ucrania en el lado militar", apostilló. "Los rusos (...) están bombardeando las reservas de trigo"

Por otra parte, Borrell ha insistido a combatir la narrativa rusa, porque igual que con la pandemia ha llevado a cabo una "diplomacia de la vacuna" sobre los beneficios de su fármaco contra el covid-19, ahora ejerce una "diplomacia alimentaria". "Los rusos (...) están bombardeando las reservas de trigo y evitando que ese trigo se pueda exportar. Hay un gran número de barcos que no pueden abandonar los puertos ucranianos. Eso está causando escasez. Están bombardeando las ciudades ucranianas y provocando hambre en el mundo". "Dejen de acusar a las sanciones", pidió Borrell al Kremlin.

En lo que se refiere a las sanciones europeas contra Rusia, Borrell dice que siguen "discutiendo cómo implementarlas" para "evitar lagunas". "Nada está fuera de la mesa, incluyendo sanciones sobre el petróleo y el gas, pero hoy no se tomó ninguna decisión", indica, después de que la semana pasada la UE aprobara un quinto paquete de medidas restrictivas contra Moscú que en el campo de la energía solo vetó el carbón ruso a partir de agosto. Borrell detalla que, en 2021, la cuenta de las importaciones de petróleo fue cuatro veces mayor que la del gas, 80.000 millones de euros frente a 20.000 millones, por lo que aboga por empezar a sancionar por el crudo, "que es una factura grande y fácil de reemplazar". Borrell considera que la dependencia de la energía rusa se puede reducir de forma voluntaria, "cada uno por su lado", o de forma colectiva y vinculante, "ya sea mediante un impuesto o una limitación de cantidad".

En cualquier caso, el político español declara que las batallas de los próximos días y semanas "van a tener lugar con o sin sanciones". "Compremos gas o no, el ejército ruso tendrá en los próximos días los medios para hacer la guerra igualmente, así que hay que concentrarse en los aspectos defensivos, es lo primordial en este momento", comenta.