Sin duda, el baloncesto español está en uno de sus mejores momentos. En un verano impresionante, las nueve selecciones que han jugado Mundiales o Europeos (sub-16, sub-17, sub-18 y sub-20 de chicos y chicas, y el Eurobasket absoluto masculino) han llegado a sus respectivas finales, mostrando un nivel extraordinario. Pablo Bretos, presidente de la Federación Navarra de Baloncesto (FNB), habla sobre la actualidad baloncestística tanto regional como nacional.

Como presidente de la FNB, ¿de qué manera ha vivido el oro de España en el Eurobasket y el éxito en las demás categorías inferiores, llegando a hacer este verano pleno de nueve finales en los nueve Europeos o Mundiales en los que han participado?

–Como te puedes imaginar, es extraordinario. En relación a la selección absoluta, creo que la estancia de esos seis días en Pamplona para preparar el Eurobasket, así como el partido ante Islandia, fue un chute de motivación para la selección, y así me lo confirmaron desde la federación. Pamplona ha vuelto a ser importante para la preparación gracias, especialmente, a la cantidad de sistemas defensivos puestos en práctica, así que Navarra tiene su parte en este triunfo.

¿A qué cree que se debe este éxito de la selcción? ¿Por qué ha funcionado tan bien?

–Creo que hay que comenzar fijándose en las categorías inferiores, pues existe un gran trabajo a nivel autonómico por parte de las distintas federaciones. Ya se ve en los campeonatos autonómicos. Observo que hay, desde niños, un nivel excepcional de jugadores muy buenos. Luego seleccionan a los mejores, pero la capacidad de entrenamiento de los técnicos nacionales de categorías inferiores está siendo muy buena, y así se ha visto en los resultados, pues hemos estado en todas las finales. En cuanto a la absoluta, este Eurobasket ha demostrado que en la competición FIBA ha triunfado el equipo. En la final España-Francia ningún equipo es que tuviera figuras claramente determinantes como Jokic, Doncic o Antetokoumpo, que en el sistema FIBA son más fáciles de defender. Esto ha hecho ver que la labor de equipo es fundamental. Alberto Díaz, por ejemplo, ha tenido una gran capacidad defensiva para anular a grandes figuras en cada partido. Lo importante es tener un equipo compacto, motivado y con ganas.

Quizás sea pronto para evaluarlo, pero ¿se ven reflejados estos éxitos de la selección en el número de inscripciones? ¿Cree que puede animar a la gente a jugar a baloncesto?

–Sí, no te quepa la menor duda. El hecho de que hasta cuatro y cinco millones de personas hayan podido ver la final en abierto, hace atraer a más gente al deporte y al baloncesto en particular. Para los chavales pequeños, tener una élite y unos referentes en los que fijarse es una motivación muy importante. Pero a todos los niveles, tanto en el baloncesto élite, como árbitros ejemplares, etcétera

¿Tiene esperanzas de poder ver más pronto que tarde a un jugador navarro debutar con la absoluta masculina? Igual que está haciendo Irati Etxarri en la femenina y que, con su juventud, seguro que tiene un gran futuro por delante.

–Pues sí. La verdad es que en la selección femenina ya tenemos una jugadora referente y creo que lo será en la selección española. Ya lo demostró en las demás categorías y en los equipos en los que jugó. En cuanto a los chicos, cada vez tenemos más buenos jugadores. Por ejemplo, Basket Navarra ha fichado ahora a dos. Competimos mejor en chicas, pero tenemos que replantearnos el tema de los talentos masculinos para conseguir que puedan llegar arriba los que tengan capacidad, ganas y se lo trabajen bien.

A raíz del panorama femenino, ¿está ya atada la visita de la selección a Pamplona?

–No. Todavía no hemos hablado. Habrá que ver de cara al verano y a la pretemporada cómo se hace, pero seguro que vendrá.

Tras el último éxito de España en el Eurobasket, triunfando con jugadores jóvenes, ¿cree que hay ilusión por parte de los clubes en trabajar bien con las canteras y formar buenos jugadores?

–En chicas, sí, porque todo está estructurado. Es decir, todos los clubes estamos en una estructura escalonada donde las chavalas, a media que crecen, van a ir subiendo de categoría: de Segunda Nacional a Primera Nacional, después a Primera Femenina, y luego a LF Challenge. Luego, el objetivo es subir a Liga Femeina 1. En chicos es donde tenemos que trabajar esa estructura y conseguir que el chaval joven que tenga calidad y ganas pueda ir subiendo escalonadamente, así como tener un equipo como el Basket Navarra en Leb Plata, con una representación navarra sustancial y con otros dos o tres chicos de fuera bastante importantes.

¿Cuál es el número total de equipos y jugadores federados en la comunidad?

–En Navarra hay federados 52 clubes, 440 equipos y 7.000 fichas.

Es una tendencia curiosa, pero ¿a qué se debe que haya más chicas que chicos jugando a baloncesto federado en Navarra?

–Esto pasa aquí, pero también a nivel nacional. Rondaremos el 60% de fichas femeninas por un 40% de masculinas. Encima en un deporte de equipo y que no es como el montañismo, por ejemplo, que te haces una licencia y puedes ir o no. Aquí se entrena tres días a la semana y se juega el sábado. Es una cuestión de compromiso. Nosotros nacimos en el año 46, y en el 47 ya había equipo femenino. Lo bueno que tiene el baloncesto es que juegan cinco, y con eso ya se puede hacer un equipo. Con siete u ocho ya tienes un equipo con respuesta. Es un deporte de equipo en el que se trabajan muchos valores como la amistad o el compañerismo, y las chicas se sienten muy acogidas en este deporte, además de que compiten muy bien y juegan de maravilla, con contacto y peleas impresionantes. Eso es muy bonito de ver y bueno para el baloncesto, y desde el pricipio ha sido un deporte que ha acogido muy bien a las mujeres.