María Asurmendi (Pamplona, 04/04/1986) disputará su tercera temporada en Osés Construcción Ardoi, tras el descenso de Liga Femenina a Liga Challenge el curso pasado, con una ambición renovada y con el combustible al máximo pese a tener 39 años. Aún así, es consciente de que todo tiene su fin y no tiene problemas en hablar del tema. La pamplonesa también echó una mirada al pasado hablando se su extensa carrera y al futuro sobre las nuevas promesas del baloncesto femenino navarro.
¿Cómo afronta su tercera temporada en Osés Construcción Ardoi tras el descenso del año pasado?
La verdad es que fue un palo duro. Después de haber conseguido la Liga Challenge en 2023, que supuso ascender y ahora descender... pues es un cambio importante.
¿Cómo le afectó ese descenso a nivel personal?
A nivel personal me encontré bien, pese a que tuve ciertas molestias físicas. Creo que a nivel individual es una liga en la que me adapté bien, estuve contenta. Pero es cierto que a nivel colectivo no conseguimos dar con la tecla ni ser un equipo sólido a lo largo de la temporada. Y lo asimilo porque no queda otra, pero sí que me quedo con el paso del tiempo, pues con la sensación de haber perdido una oportunidad muy grande de intentar consolidar a Pamplona y a Navarra en la élite del baloncesto. Es muy difícil llegar hasta allí, pero aunque se intentó no se consiguió. Queda mirar al futuro.
¿Cómo está el ambiente en el grupo actualmente tras una temporada pasada complicada?
Bien, muy bien. Con ilusión, es lo que te digo. Tenemos un nuevo reto por delante con muchas caras nuevas. Volvemos a empezar la temporada y tenemos ilusión por hacer las cosas bien, por volver a la senda de la victoria, tener alegrías los fines de semana. Lo que te digo, luchar por estar lo más arriba posible y ver hasta dónde podemos llegar.
A sus 39 años, ¿qué le motiva a seguir compitiendo al máximo nivel?
Al final, pues la experiencia, todos los años jugando a baloncesto, las experiencias que he vivido, pues me ayudan también a poder ayudar a mis compañeras, no sé, creo que sigo teniendo cosas que aportar y sobre todo lo disfruto y me gusta mucho competir.
“Cuando vas cumpliendo años el retiro no aparece de un día para otro. Sabes que la vida de un deportista tiene fecha de caducidad”
¿Se ha planteado en algún momento que esta pueda ser su última temporada como jugadora?
Lo dije al principio de temporada, no es mi idea, pero cuando vas cumpliendo años el retiro no aparece de un día para otro. Sabes que la vida de un deportista tiene fecha de caducidad y la mía cada vez está más cerca. Este año está más cerca que el año pasado, así que sí que es una idea que tengo en mente y, bueno, veremos cómo acaba el año. Esta podría ser mi última temporada porque ya son muchos años y al final, aunque te encuentras bien a nivel físico y aunque tengas ahí cierto baloncesto, las temporadas pesan. A nivel mental, es una exigencia importante y, bueno, por eso digo que me centro en disfrutar esta temporada y veremos qué pasa. Pase lo que pase, quiero disfrutar cada día y así la estoy afrontando.
¿Qué objetivos colectivos se marcan para esta campaña en Liga Femenina Challenge?
Ha habido muchas cosas a las que adaptarnos. Somos ambiciosas, pero debemos tener los pies en el suelo. Saber que venimos de un año complicado y tenemos ganas de estar arriba. Queremos estar ahí peleando por los puestos de arriba y sí que nos gustaría estar en play-offs. A partir de ahí, pues ver a dónde podemos aspirar, pero siempre con los pies en el suelo, con la tranquilidad y la calma de intentar hacer las cosas bien para que, si se da la oportunidad, poder estar y tener la estructura necesaria para dar los siguientes pasos.
Después de una derrota dura en el estreno y una victoria fuera de casa en la última jornada, ¿cómo ha cambiado el ánimo del vestuario?
El equipo no se desanimó porque jugamos contra el equipo de Azul Marino Mallorca, que con todo el respeto y con que al final puede pasar cualquier cosa, es el equipo candidato al ascenso directo. Tiene una plantilla casi de Liga Femenina, te diría. Entonces a nosotras se nos juntó que era el inicio, con dos lesiones importantes y con un súper equipo enfrente. Aguantamos 20-25 minutos, pero después fueron un rodillo. Entonces nos quedamos con las cosas a mejorar, con aspectos que sabíamos que estaban en nuestra mano, otras no. Y este pasado fin de semana en Zamora recuperamos efectivos, era un equipo más de nuestra liga y la verdad es que muy contentas por sacar la primera victoria. Y no es que el equipo cambiara, sino que seguimos creciendo, seguimos entrenando y este fin de semana en casa esperemos seguir esa dinámica.
“El año pasado a la afición le pudimos regalar muchas victorias y queremos que disfruten de un año bonito”
Este domingo vuelven a jugar ante su afición, ¿qué papel puede jugar el público?
Siempre es muy importante, si encima consigues sacar victorias fuera, añadido al poder consolidarte en casa... Eso se nota en la clasificación. Para nosotras es un plus jugar en Arrosadía con nuestra gente, queremos darles victorias. El año pasado no les pudimos regalar muchas y queremos que la gente que es fiel, siga viniendo con nosotras, nos siga apoyando y que disfruten de un año bonito.
Imagino que para conseguir los objetivos es primordial hacer de Arrosadía un fortín, ¿no?
Sí, sumar fuera suele ser complicado, pero hacer de Arrosadía un fortín es nuestra misión.
“Le dije a Juantxo que estoy para lo que necesite y considere. Ayudaré siempre en cualquier faceta”
Qué le ha pedido el entrenador Juantxo Ferreira en este inicio de temporada?
Ya estoy entendiendo mis roles dentro del equipo, siempre me he adaptado con mucha facilidad a lo que sea. Le dije a Juantxo que estoy para lo que él necesite y considere y ayudaré en cualquier faceta. Siempre trato de ayudar al máximo a mis compañeras y sobre todo aportar al equipo. Eso creo que es algo que me ha definido a lo largo de mi carrera, que soy una jugadora de equipo y al final las jóvenes vienen pisando fuerte. Tenemos muy buenas jugadoras.
¿Qué le aportan al club las jóvenes jugadoras del equipo, como Andrea Elso?
Para el club es importante. Aporta mucha frescura, físico y técnica. Al final estos últimos años el baloncesto va cambiando. Y creo que todas estas jugadoras aportan esas cualidades y sobre todo también una identidad del equipo con la ciudad. Cuantas más jugadoras de nivel lleguen al equipo, más lo identificará la afición y será más importante también para el club.
Y más allá del club, ¿cómo ve el nivel y la proyección de las nuevas generaciones navarras, como Paula Suárez?
Van saliendo jugadoras navarras y eso es bueno. Es verdad que al final estamos un poco desperdigadas porque no conseguimos mantener el equipo y estas jugadoras que tienen nivel están en ligas más potentes. Pero creo que la prueba es que los últimos años van saliendo jugadoras navarras. El baloncesto femenino navarro va gozando de buena salud a nivel individual. Así que tenemos que intentar conseguir que los equipos y las estructuras de los equipos de élite garanticen el poder estar ahí.
Durante su trayectoria ha vivido ascensos, títulos y descensos, ¿qué enseñanza le deja cada etapa de su carrera?
Este es un momento en el que a veces lo piensas, porque ya ves ahí un poco que llega como el final del camino. Yo me siento agradecida porque cada etapa me ha enseñado cosas, las he disfrutado al máximo y a mí me parece muy loco el haber podido estar en equipos de descenso a equipos que he ganado muchísimos títulos. Son experiencias que al final siempre he dicho que a mí me han curtido, no solo como jugadora, sino que me han hecho un poco también mi forma de ser. Feliz de haber podido vivir todas las experiencias que he tenido.
¿Hasta el momento cuál ha sido su mejor momento?
Es muy difícil elegir con tantos momentos, pero a mí de las cosas más importantes que he vivido y las más especiales son los dos ascensos. El primero con el Unión Navarra Basket (UNB) y el ascenso de hace dos años con Ardoi. Esos han sido dos momentos muy especiales por lo que significa el poder ayudar a tener un equipo en la élite en Navarra. Para mí eso es muy especial. Y después el primer título que gané en mi carrera que fue una Copa de la Reina con el Conquero, donde nadie nos daba como candidatas a ese título. Me acuerdo que cuando cogí el trofeo dije que jamás pensé que podría tener en mi mano uno de estos. Luego vino todo lo que vino y he podido disfrutar varios más.
En su carrera ha jugado en equipos campeones como Perfumerías Avenida, ¿qué diferencias encuentra entre aquellos vestuarios y uno más modesto como Ardoi?
No tienen nada que ver. Estamos hablando de clubes, presupuestos, objetivos, plantillas distintas. Todo es muy diferente. La exigencia que se tiene en clubes como puede ser Perfumerías Avenida, donde optas a ganar prácticamente todos los títulos, es grande. Esa exigencia y esa presión está ahí. La estructura y todos los medios están adaptados para intentar conseguir los títulos. Y no sé si decirte ligas diferente, pero desde luego Ardoi es un club mucho más humilde que un Perfumerías Avenida que ya te digo, tiene un palmarés increíble y que jugar allí supone una presión y una exigencia muy alta y muy elevada.
Cómo ha cambiado su forma de jugar con los años?
Sí que cambia, al final ahora cuando el físico no es el punto fuerte al final tienes que tirar de tu inteligencia, de tu visión del juego, de saber que los esfuerzos que haces son mucho más controlados, otro tipo de inteligencia y te adaptas. Y creo que siempre he tenido como objetivo a lo largo de toda mi trayectoria intentar ser la jugadora más completa posible. Siempre digo a las chicas que cuando una persona solo hace una cosa al final es muy predecible. Siempre he intentado ser una base que dirige, pero también que pueda anotar que puede pasar, que controla los tipos de partido. Al final a lo largo de los años vas puliendo, te vas adaptando, vas viendo lo que quieres y sobre todo entrenando vas mejorando. Al final fíjate los años que llevo entrenando diariamente, vas poniendo el foco y el detalle y creo que sí que he conseguido mejorar y adaptarme y sobre todo con el paso de los años .
Y, por último, si mira al futuro, ¿qué le gustaría que dijeran de María Asurmendi cuando se retire?
Sobre todo me gustaría que se acordaran de María Asurmendi como persona, no solo como jugadora, sino que cualquiera que no te conozca vea que has sido una buena compañera, una buena persona y una compañera que ha estado ahí para lo que hayan necesitado.