Osés Construcción ya está aquí. Tras un mal primer partido a causa de las bajas, el equipo navarro confirmó en Arrosadia que van a ser un equipo de los que pelean por estar arriba y venció al Al-Qazeres (85-53), un rival de los pujantes de la categoría, gracias a un excelso primer cuarto.

La victoria en Zamora de la semana pasada solo era un presagio del vendaval que tenía preparado Osés para el primer cuarto ante el equipo extremeño. Apoyados en una defensa sólida y, también, en la falta de acierto del rival desde el triple (1 de 15 al descanso), las de Juantxo Ferreira impusieron su ritmo, ágil pero más controlado que el del rival, y fueron abriendo brecha en el marcador gracias a Gutiérrez y Mungo, principalmente.

Con once puntos de ventaja al acabar el primer cuarto, las navarras sufrieron algo en el rebote defensivo, pero tampoco es que las rivales transformasen eso en puntos, así que liderados esta vez por Mamen Blanco, fueron ampliando la ventaja hasta llegar a unos cómodos quince puntos de renta al descanso (38-23).

Segunda parte

Pese a que las extremeñas dieron un aviso al arrancar el cuarto poniendo la distancia a tan solo 10 puntos, Faustine Parra acribilló la defensa zonal visitante con dos triples lejanísimos volviendo a dejar la distancia en casi en la veintena de tantos.

Si a Osés le quedaba alguna duda, entre Asurmendi y Wone finiquitaron el partido con más acciones positivas en ataque. Entre eso y un triple de Recarte, la distancia se fue a los treinta puntos. Una barbaridad si se tiene en cuenta el rival. Y un buen mensaje para la Liga: Osés quiere estar arriba.