GYÖRI AUDI ETO 24 Lunde (p), Verten (2), Mravikova (2), Görbicz (8,6p), Bradeanu (1), Hornyak (4) y Spiridon -siete inicial- Schatzl, Kovacsics (2), Amorim (2), Orban, Mayer (1), Gros (2) y Palinger (ps).

ITXAKO REYNO DE NAVARRA 24 Navarro (p), Barnó, Soit (2,1p), Martín, Turey (3,2p), Fernández (1) y Barbosa (5) -siete inicial- Stefani (ps), Egozkue (1), Pinedo (1), Aguilar (3), Tervel, Alonso (7,2p) y Pena (1).

Marcador cada cinco minutos 1-1, 2-2, 3-4, 4-6, 7-8, 10-12 (descanso) 12-13, 13-15, 16-19, 19-20, 21-21 y 24-24.

Árbitros Nenad Krstic y Peter Ljubic (Eslovenia). Excluyeron por las locales a Amorim, Spiridon (2) y al técnico, Csaba Konkoly (min.50); por Itxako, a Barnó, Tervel, Soit, Alonso y Fernández (2).

Incidencias Lleno total en el Magvassy Mihaly Sporthalle de Györ, con alrededor de 2.800 aficionados húngaros. Estuvo representado el Gobierno de Navarra por mediación de la consejera de Asuntos Sociales, Maribel García Malo, y del director gerente en funciones del Instituto de Deporte, Nacho Arbeloa.

GYÖR (HUNGRÍA). Itxako Reyno de Navarra jugará en mayo contra el Larvik noruego su primera final de la Liga de Campeones tras lograr ayer en Hungría un merecido billete ante el gran favorito de la eliminatoria, el Györi Audi ETO. Las navarras terminaron empatando (24-24) un partido que dominaron de principio a fin nuevamente gracias a una sensacional defensa y a su pausa, su madurez y su inteligencia en ataque. Aunque la semifinal se ganó en Estella, ayer el equipo volvió a doctorarse en Europa, plantando cara a un espectacular rival que no ha brillado tanto en la eliminatoria gracias al buen hacer de las de Ambros Martín.

El partido comenzó, como es costumbre en Hungría y más en una semifinal, con un gran ambiente en el Magvassy Mihaly Sporthalle de Györ, donde Itxako se presentó sin la pivote rusa Natalia Kurbanova, el descarte obligado que tuvo que hacer el cuerpo técnico. El equipo salió al parqué muy enchufado y tranquilo, todo lo contrario que las magiares, para quienes era toda la presión. Itxako se empezó adelantando pero pronto puso la réplica el Györi (1-1, m.3). En esos primeros minutos el rival no salió a morder, como se esperaba, y fue una fase en la que las defensas contuvieron bien a los ataques. Sobre todo la navarra, lo que le permitió coger sus primeras rentas (2-4, m. 12). El Györi tenía muchísimos problemas para superar el 6/0 de las de Estella, y optaba por el lanzamiento exterior con muy poca fortuna. Itxako llegaba con más claridad, y en apenas siete minutos, a pesar de recibir dos exclusiones seguidas, empezó a irse en el marcador con goles de Aguilar, Pinedo y Alonso, espectacular ayer la asturiana desde su extremo (4-8, m.20).

Las húngaras se vieron contra las cuerdas y lograron empatar muy pronto, pero las de Ambros seguían dominando el tempo del partido con bastante comodidad y aprovechando sus armas. Alonso y una contra de Barbosa dejaron el electrónico al descanso con un esperanzador 10-12.

En la segunda mitad Ambros sacó a Tervel en la defensa, pero mantuvo el 6/0 sorprendiendo a un Györi que seguramente esperaba encontrarse con el avanzado que tanto daño le hizo en Estella. Y el técnico húngaro, viendo que se le iba la final, se jugó el todo por el todo colocando una 4/2 mixta sobre Soit y Macarena que Itxako supo sobrellevar muy bien. Incluso logró ampliar su ventaja hasta los tres goles (m.46), aunque al final el empuje de las magiares, apoyadas por su público, les permitió empatar el encuentro.

Con el 22-22 a falta de dos minutos el banquillo navarro ya empezaba a celebrar un nuevo éxito en la historia del club estellés, que inició la Champions como una de las cenicientas. Quizá por eso cuando sonó la bocina se escaparon algunas lágrimas, además de saltos, abrazos y gritos de felicidad. El equipo se volvió loco y fue a celebrarlo con los pocos aficionados que se han desplazado a Hungría, entre ellos la consejera Maribel García Malo, y con los directivos del club, que también estaban tremendamente emocionados con el logro conseguido. Ahora toca esperar al sorteo de mañana en Viena para saber si se juega primero la ida de la final en casa o fuera. Será los fines de semana del 7 y 14 de mayo.