Hay personas que dejan una huella imborrable. A las que se les recuerda desde el cariño sincero, porque se lo ganaron. Y una de ellas es Iñaki Sánchez Martínez, más conocido como El Jefe. El jugador del Anaitazarra, cuya vida deportiva estuvo muy ligada al Beti Onak, falleció a los 49 años el pasado mes de septiembre, causando una profunda consternación en el balonmano navarro. Sus amigos quieren juntarse y recordarlo, y para ello han organizado “un tributo” muy especial mañana sábado en Anaitasuna que incluye balonmano, brindis y comida. “Vamos a rendirle un tributo, que él era heavy y los homenajes no le iban”, dice uno de ellos, Mikel Senosiain.
Como no podía ser de otra forma, a El Jefe se le va a homenajear –o mejor dicho, recordar– sobre el 40x20. Dedicó su vida al balonmano, formándose en el Beti Onak, al que estuvo ligado muchos años de su trayectoria deportiva e incluso jugó en 1ª División. Era lateral izquierdo y llegó a ostentar el récord de goles en un partido al anotar 21 tantos.
Por eso, a las 12.30 horas se jugará un partido entre los veteranos de Anaitasuna y del Beti Onak. Es decir, entre el Anaitazarra, donde todavía desplegaba su magia como jugador, y el Betizarra, constituido por sus antiguos compañeros y amigos para una ocasión tan especial.
“Se merecía este homenaje”, explica Senosiain. “La idea inicial era hacerlo en Villava y jugar allí, pero hay muchas actividades ahora mismo en el polideportivo. Así que hemos conseguido este hueco en Anaitasuna”, afirma.
Tras este partido, en el que confían contar con la colaboración del Comité Técnico de Árbitros para que todo sea redondo, tocará el turno del brindis y de la comida. Porque en cualquier celebración que se precie en esta tierra, debe haber comida de por medio. Primero se brindará, hacia las dos de la tarde, para recordar a un Iñaki Sánchez que tenía de bueno todo lo que tenía de grande, según destacan sus amigos. Y ya a las tres, se sentarán para degustar una comida “de hermandad y recuerdo”, como la han calificado.
Unas 40 personas ya se han apuntado a este homenaje –tributo, para ser más exactos–. Porque la mejor forma de recordar a El Jefe es con balonmano, comida, brindis y amigos. Sobre todo, amigos.
En las pasadas fiestas de Villava-Atarrabia, también recibió un reconocimiento por parte del Beti Onak. Este será el segundo. Señal de que dejó esa huella imborrable.
