La selección española de balonmano tratará de redimirse este domingo (18.00 horas, Teledeporte) de la contundente derrota que encajó ante Croacia en su debut en el Europeo de Alemania con una victoria sobre Rumanía, que se antoja indispensable para lograr la clasificación para la segunda fase del torneo. 

Para ello, el preparador español Jordi Ribera considera fundamental recuperar la seguridad tanto en la defensa como en la portería, de la que careció en todo momento el conjunto español ante la selección croata. Tal y como atestiguan no sólo ya las tan sólo dos paradas con las que los guardametas españoles cerraron el encuentro –Gonzalo Pérez de Vargas y el navarro Sergey Hernández–, sino el espectacular 93% de acierto en los lanzamientos que firmaron los balcánicos que, favorecidos por la endeblez defensiva del conjunto español, erraron únicamente tres remates en todo el partido.

Tareas defensivas en las que España contará ante Rumanía con el refuerzo del veterano Viran Morros, que se incorporó este sábado de urgencia a la concentración para sustituir al lesionado Miguel Sánchez-Migallón, que se perderá lo que resta del campeonato a causa de la fractura del segundo metacarpiano de la mano izquierda que sufrió ante Croacia.

Esa baja dejaba a la selección española, como reconoció el propio Ribera, sin la posibilidad de utilizar la defensa 5-1 en la que el jugador del Benfica portugués tiene un papel fundamental. Circunstancia que obligó al preparador español a recurrir a Viran Morros.

La selección rumana, de la mano del entrenador catalán Xavi Pascual, ha logrado volver a disputar, 28 años después, la fase final de un Campeonato de Europa. Un torneo en el que la Tricolori, como dejó claro el viernes ante el combinado de Austria, pese al claro 31-24 por el que acabó perdiendo con los centroeuropeos, no está dispuesta a ser una mera comparsa.

Para ello, Xavi Pascual –que compagina el cargo de seleccionador rumano con el de entrenador del Dinamo de Bucarest– cuenta con algún que otro interesante jugador como el portero Ionut Iancu, que firmó trece intervenciones, algunas de ellas de enorme mérito, ante los austríacos.

Sin embargo, Rumanía no sólo se ciñe a su portería, sino que cuenta con dos poderosos brazos, el del lateral derecho del Benfica Demis Grigoras y el del lateral izquierdo del Fraikin Granollers Iosif Buzle.

Argumentos que no bastaron a los de Xavi Pascual, extécnico del Barça, para saldar con victoria su retorno a una gran competición internacional, lastrado por el exceso de fogosidad de sus defensores, que vieron dos tarjetas rojas directas antes de acabar la primera parte ante Austria. Todo un aviso para el conjunto español, que ya sabe que tendrá que pelear los indecible para derrotar a la selección rumana y sumar un triunfo indispensable para seguir vivo en la competición.

“Ahora además del rival que tendremos delante vamos a tener un rival más que vamos a ser nosotros mismos y nuestras inseguridades, pero si somos capaces de superar eso, el equipo irá hacia arriba”, alienta el seleccionador de los Hispanos, Jordi Ribera

VIRAN MORROS YA ESTÁ CON EL EQUIPO

Viran Morros ya está a las órdenes de Jordi Ribera. El jugador, de 40 años, fue convocado de urgencia para sustituir al lesionado Miguel Sánchez-Migallón, que ante Croacia se fracturó el segundo metacarpiano de la mano izquierda y dijo adiós al torneo. Viran aseguró a su llegada que se incorpora a la selección con el objetivo de “apoyar y ayudar al máximo” al grupo. El especialista defensivo, que jugó su último partido con los Hispanos en marzo de 2022, se mostró convencido de que el equipo está lo “suficientemente preparado” para sobreponerse a la contundente derrota que encajó ante Croacia.