El desafío del Helvetia Anaitasuna: asaltar una pista inexpugnable
Quiere seguir en alza ante un Recoletas Atl. Valladolid que encadena cuatro triunfos y que está muy fuerte en su casa
El Helvetia Anaitasuna quiere seguir por el camino que inició antes del nuevo parón por las selecciones y sumar otra victoria, la tercera seguida, en una competición que va deshojando jornadas en el calendario. Esta vez los de Quique Domínguez tienen ante sí un gran desafío y no es otro que asaltar este domingo el polideportivo Huerta del Rey (12.30 h), donde el Recoletas Atlético Valladolid lleva imbatido toda la temporada e incluso acumula más de un año sin perder. Una misión complicada, pero no imposible.
Los últimos triunfos en casa ante el REBI Cuenca (33-26) y el Benidorm (30-29) dieron cuatro puntos de alivio para el Helvetia, que vio cómo se colocaba con 14 y escalaba puestos en la tabla después de rondar el descenso. Pero no se puede confiar. Porque aún quedan diez jornadas por disputarse y hay que ir a asegurar cuanto antes la permanencia. En la lucha por este objetivo no están solos y Quique Domínguez prefiere no hacer números. “No sirve de nada. Estoy centrado en el día a día y en este partido. He insistido a los jugadores en esto: que estemos pendientes de lo que tenemos que hacer nosotros y no de lo que vayan a hacer otros. Más allá de que después de cada jornada estés pendiente de los resultados que se han dado”, apunta el técnico pontevedrés, quien reconoce que “algunos jugadores necesitaban parar”.
Anaitasuna viaja a una pista que se ha convertido en un ágora inexpugnable para un Recoletas Valladolid que no sabe lo que es perder allí todavía esta temporada y que encadena cuatro victorias en Liga ante Benidorm, Granollers, Guadalajara y Nava. Su gran trayectoria este curso le ha colocado con 24 puntos en la tabla y Domínguez ya avisa de que será una “salida dura” en la que su equipo tendrá que “pelear”.
“Es uno de los equipos más en forma de la Liga, sin ninguna duda. Hay algunos jugadores que están rindiendo muy bien como Alejandro Pisonero, Toledo o los hermanos Martínez. Me preocupa que ellos llegan muy bien, con muy buenos resultados, pero sobre todo con un gran nivel de juego. Están bien en todas las fases: defienden muy bien, siendo muy incómodos para los rivales. Corren extraordinariamente, juegan a marcadores altísimos en muchos partidos y su nivel de eficacia es muy bueno. Si se le suma la confianza, es una mezcla difícil de mejorar para competir. Vamos a tener tarea”, asegura el entrenador del Helvetia, que hace una mención especial al portero argentino Juan Bar, que en Pamplona estuvo soberbio en la dolorosa derrota por 22-27, y que “seguramente le querrá dedicar una victoria a su recién nacida hija contra su querido Anaita”.
Con todo, Domínguez confía en el “juego”, la “fuerza” y el “carácter” de los suyos, que están “muy enchufados” y “conectados a la Liga”, sabiendo que “llega el tramo final de la competición”.