BARÇA 30
SC MAGDEBURGO 31
Barça (18+12) Nielsen (1) (p); Janc, Mem (8), Makuc (3), N’Guessan (5), Frade (2) y Ariño (3) –siete inicial–; Carlsbogard (2), Wanne, Gómez (2p), Petrus, Palomino, Gérard (ps), Richardson (4, 2p), Cikusa y Rodríguez.
SC Magdeburgo (18+13) Sergey Hernández (p); Claar (3), Magnusson (11,8p), Serradilla, Mertens (2), Jensen y Honke (7, 1p) –siete inicial–; Zechel, Kristjansson (1), Pettersson, Weber, Lagergren (4), O’Sullivan, Damgaard, Bergendahl (1), Saugstrup (2) y Portner (ps).
Marcador cada cinco minutos 4-3, 7-5, 10-8, 14-12, 17-14, 18-18 (descanso); 21-20, 23-21, 24-23, 26-27, 29-29 y 30-31 (final).
Árbitros Slave Nikolov y Gjorgji Nachevski (Macedonia). Mostraron tarjeta roja a Thiagus Petrus (m.25), Jonathan Carlsbogard (m.57) y a Aitor Ariño (m.58) por parte del Barça.
Pabellón Lanxess Arena de Colonia.
Sólo podía pasar uno y ese fue Sergey Hernández. El portero pamplonés del SC Magdeburgo puede alcanzar este domingo la gloria europea, coronarse con el máximo título continental por clubes, si su equipo consigue vencer en la final de este domingo (18.00 horas) al Füchse Berlín. Por el camino se quedó el Barça de Antonio Bazán –quien no pudo vivir la adrenalina de jugar en el Lanxess Arena de Colonia al ser desconvocado–, tras perder por 30-31 ante los alemanes en un partido con un final agónico y en el que los azulgranas vieron tres rojas.
Sergey tratará de agrandar una vitrina donde ya luce una European League, la que ganó con el Benfica en 2022. Ahora buscará adornarla con el título europeo más anhelado. Su amigo Antonio Bazán intentará con el Barça traerse el tercer puesto de esta Final 4. Su rival será el HBC Nantes francés (15.00 h), que perdió ante el Füchse Berlín (34-24).
Gol sobre la bocina
Un gol del extremo alemán Tim Hornke sobre la bocina destronó al Barça y lo privó de luchar por su decimotercera Champions.
Como en 2023, cuando el conjunto que dirige Carlos Ortega cayó en semifinales ante el cuadro germano en los penaltis, nuevamente tropieza con el mismo rival.
El Barça afrontó los dos últimos minutos con ventaja en el marcador (30-29), pero las expulsiones de Jonathan Carlsbogrd y Aitor Ariño en ese tramo decisivo condicionaron el desenlace y condenaron al equipo azulgrana a disputar el partido por el tercer puesto.
El partido arrancó eléctrico. El Barça golpeó primero, guiado por la inspiración de Mem y N'Guessan, que desatascaron el ataque azulgrana con acciones de puro talento. Pero el Magdeburgo no tardó en responder. Hornke, muy activo desde el extremo, anotó dos de los primeros cuatro tantos de su equipo para frenar el empuje inicial del conjunto español (5-4, m.5).
Mem seguía en estado de gracia. Sus compañeros lo buscaban, dándole el espacio necesario para soltar el brazo. Su energía también se notaba atrás, donde el Barça elevó el nivel defensivo para estirar la renta (10-7, min.13).
El Magdeburgo no se rendía. Con Magnusson liderando la reacción, el equipo alemán colocó a un gol pasado el ecuador de la primera mitad (10-9, m.15). Pero el Barça supo gestionar el momento. Makuc asumió galones y, entre fintas, asistencias y goles, volvió a abrir brecha (13-10, m.18).
El conjunto azulgrana, muy sólido atrás, aprovechó la permisividad arbitral para endurecer su defensa. Eso desactivó los ataques largos del Magdeburgo y reforzó la confianza de un Barça afinado en ambos lados de la pista.
Sin embargo, el criterio arbitral cambió de golpe con la roja directa a Petrus por un contacto que los colegiados interpretaron con dureza. El castigo descolocó al conjunto azulgrana, que encajó un parcial de 1-3 en los últimos minutos del primer tiempo para el 18-18 al descanso.
Desenlace con tensión
Tras el paso por vestuarios, el partido se movía en el alambre, sin que ningún equipo lograra abrir brecha. Hasta que emergió Nielsen. El portero del Barça, desaparecido en los primeros treinta minutos, encadenó tres paradas que junto a un momento de lucidez ofensiva permitieron a su equipo recuperar un valioso botín de tres goles (24-21, m.31).
Pero la réplica llegó desde el otro lado. Portner entró por un desacertado Sergey Hernández y cambió la dinámica del choque. Con tres intervenciones de mérito, el suizo frenó al cuadro azulgrana y permitió al Magdeburgo darle la vuelta al marcador por primera vez en el partido (24-25, m.46).
El Barça empezó a jugar siempre a remolque tras la salida de Mem por molestias musculares. Richardson, en su penúltimo partido como azulgrana, asumió la responsabilidad con tres goles seguidos y provocó la exclusión del español Serradilla, lo que permitió al Barça anotar dos tantos sin portero para ponerse 29-27 (m.52).
Los últimos minutos fueron de infarto. El Magdeburgo recuperó un parcial de 0-2 y el partido estaba en un pulso (29-29, m.55). Nielsen evitó en dos ocasiones que el Magdeburgo se colocase por delante y a continuación dos acciones castigadas con roja directa a Carlsbogard y Ariño, y un penalti transformado por Hornke dejaron el 30-30 a un minuto del final.
Falló Richardson el lanzamiento de la victoria y, sobre la bocina, el alemán Hornke selló el triunfo de su equipo (30-31), que se medirá al Füchse Berlín en la final y deja al Barça sin poder luchar por su 13ª Champions.
El Füchse no da opción
El Füchse Berlín luchará este domingo por su primera Champions tras imponerse por un contundente 34-24 al Nantes francés en la primera semifinal disputada en el Lanxess Arena de Colonia.
El equipo alemán supo sobreponerse a la temprana expulsión de su máximo goleador, Mathias Gidsel, en el minuto 8 del partido.
La actuación del guardameta serbio Dejan Milosavljev, que terminó con 17 paradas y un 40 % de efectividad, junto al extremo Tim Freihöfer, máximo anotador del encuentro con diez tantos, fueron decisivas para la victoria del equipo alemán.