Bizardunak, el folk radical vasco
El concierto comenzará a partir de las 22.00 horas y el precio de las entradas es de 5 euros. Bizardunak presentará en directo las canciones de su nuevo álbum, Ur ederra kirats infinituan.
Metafóricos, oscuros en ocasiones, contradictorios y con alguna canción de 'humor', el teléfono de Bizardunak no deja de sonar para dar conciertos a lo largo y ancho de Euskal Herria. Jose Mari, voz cantante y principal letrista de Bizardunak, fue el encargado de responder a las preguntas de EL CAMALEÓN.
-Bizardunak, sin dejar de lado su espíritu folk, ¿se ha marcado su disco más rockero?
-Desde luego. Se puede decir que hemos cambiado el formato del grupo. Hemos puesto al baterista a tocar la batería de verdad, sentado, y a Adolfo con la guitarra solista. Le hemos dado la vuelta al sonido que teníamos, intentando buscar algo que no habíamos hecho antes, que es mezclar el folk con el rock and roll. La actitud rockera la teníamos, lo que sucede es que en los discos no habíamos metido ni guitarras ni un batería tocando la batería... Éramos rockeros que hacíamos folk; ahora hacemos folk y rock a la vez.
-En directo, ¿mantendréis esta nueva vuelta de tuerca o primará el espíritu folk anterior?
-En directo intentaremos recrear el sonido del disco, por lo que también hemos sentado al batería y llevaremos amplificadores de guitarras eléctricas. Y, respecto al repertorio viejo, algunas canciones las hemos dejado como estaban y a otras les hemos dado la vuelta, dentro de un proceso complejo, ya que eran canciones de folk muy marcadas. Pero, inspirándonos en grupos de los 70 como Fairport Convention, creo que lo hemos conseguido.
-Para marcar el cambio, en la grabación habéis contado con la producción de Luther Russel.
-Teníamos claro que el nuevo disco iba a ser una mezcla de rock y folk y que en los álbumes de los grupos americanos e ingleses que nos gustan de verdad hay cierto tipo de sonido, una magia, que se puede explicar. Aquí hay estudios cojonudos y se graba muy bien, pero ese tipo de rock sucio, con esa magia... necesitábamos algo más conseguirlo. Tuvimos la suerte de tener el contacto de Luther, le mandamos la maqueta, le gustó mucho y se vino de cabeza a hacerlo. Nuestro miedo era que ese rock sucio que ya teníamos en la bajera no se trasladara al disco, pero Luther llegó, quitó todos los ordenadores y nos grabó a todos juntos en cinta analógica, y funcionó muy bien.
-¿A dónde habéis querido trasladar al público con el título 'Ur ederra kirats infinituan (Agua bella en el hedor infinito)'
-Está claro, nosotros somos el agua bella y todo lo demás es el hedor infinito (risas). Era una manera de hacer ver que creemos tener razón en todo, estamos muy seguros de lo que hacemos... Sobre todo musical más que políticamente, ya que en este disco hemos primado lo musical sobre las letras, aunque, al final, escribimos sobre lo que escribimos y parece que la gente sigue fijándose más en la letra que en la música, lo cual nos sorprende bastante.
-En cierto modo, ¿también habéis apartado algo lo político para centraros más en lo social?
-Las letras han sido algo secundario en este disco, ya sabíamos que hacíamos buenas letras, lo que realmente queríamos hacer era música muy buena; y ahí es donde hemos puesto toda nuestra energía... En la búsqueda de sonidos, de arreglos... Somos muchos compositores, escuchamos muchos tipos de música y, de alguna manera, con el sonid+o intentas homogeneizar todas esas influencias que van desde la psicodelia hasta el country o el pop.
-El disco arranca, tras la instrumental 'Ur ederra', con 'Barrezka'. ¿Humor negro para abrir boca?
-Es una canción que describe muy bien lo que pensamos del mundo. Podemos estar muy politizados pero la política no marca nuestra vida, somos muy cínicos, con un humor bastante negro y muy bestias en algunos aspectos... Cuando vamos en la furgoneta, echando unos tragos, es cuando se oyen burradas terribles; no son cosas que se puedan poner en una canción, pero, de alguna forma, quería trasladar ese espíritu, esa bestialidad, a una canción.
-¿Por qué mataremos Euskal Herria?
-Porque somos unos negados... No quiero hablar de esta letra (Hilko dugu Euskalherria), ya está escrita y es muy gráfica; cada uno que la lea y saque la conclusión que quiera.
-'Omega Mailua (Casta de Bastardos)', ¿bebe de la novela de Aingeru Epaltza?
-Efectivamente, nos impacto muchísimo la novela. Además, en Bizardunak existe la pequeña tradición de que, en cada disco, hacemos una letra derivada de una novela, que no es un resumen, sino lo que nos sugiere la misma. En el primero lo hicimos con La cruz sangrienta, en el segundo con Sin novedad en el frente y en este con Casta de Bastardos.
-'Donibaneko okindegia', ¿vuestro pequeño homenaje al asesinado Ángel Berrueta?
-Realmente es una reflexión sobre lo que sucedió con Ángel, nos marcó mucho. También escribimos sobre los sucesos de 78 pero es que a mí me marcó mucho lo de Ángel, ya que lo viví en primera persona. La canción entronca con la música folk, que en general pretende hacer frescos, instantáneas, de las cosas que te toca vivir.
-'Los violentos de Dios', la cara más negra de una sucia conquista...
-Por un lado es lo que cuenta la letra, pero, por otro, me gusta el enfoque de alternativo... Ya que yo he visto muchas veces a nacionalistas vascos hablando del imperialismo español en América. ¡Cuidado! ¡Frena! Allí fuimos todos responsables y todos nos pringamos de mierda. No hay más que ver, a día de hoy, a oligarcas blancos con apellidos vascos. Ha sido una manera de hacer ver que no somos ni tan guapos ni tan listos, que todos tenemos nuestra mierda detrás.