Armendáriz: "En cine vales tanto como la última recaudación que has hecho"
el cineasta dialogó ayer con alumnos de la escuela de arte Inmerso en un guión del que prefiere no hablar, defendió las historias humanas sobre las grandes producciones
pamplona. De Anastasio Ochoa, el "héroe anónimo" que inspiró su célebre personaje Tasio, a Montxo Armendáriz le "atrapó" su fidelidad a la forma que tenía de entender el mundo: creía que trabajar para otros era una esclavitud, y se negaba a ello. El cineasta también lucha a su manera por mantenerse fiel a su modo de entender el cine, del que defiende el poder de "las historias y las emociones sobre las grandes producciones". Aunque implique vender menos.
En ello se reafirmó ayer Armendáriz (Olleta, 1949) en la Escuela de Arte de Pamplona, durante el primero de los V Encuentros con creadores del centro. "Claro que una película tiene que ser rentable, pero de ahí a que sea un gran éxito comercial hay un salto cualitativo... Y cada uno elige", comentó, y afirmó que, eso sí, "todos queremos llegar a la gente, a cuanta más mejor. Los directores de cine no hacemos las películas de espaldas a la taquilla, cuando se dice eso no es verdad". Matizó que "no puedes prever el resultado, sucede que la historia que menos piensas triunfa, y ha habido producciones de Spielberg que han sido un fiasco en taquilla". Él recuerda bien los días en que intentaba vender el guión de Tasio en Madrid y las veces que escuchó: "Pero si aquí no pasa nada, ni follan ni nada... ¿Y con actores desconocidos? Esto no vende".
Tras No tengas miedo (2011), Armendáriz está inmerso en la escritura de un nuevo guión del que prefiere no hablar todavía: "No me gusta hablar de los proyectos hasta que no están en marcha, porque puede que no lleguen a realizarse, y más ahora, en estos tiempos tan inestables". Sobre todo para las pequeñas productoras, como la suya, que lucha por mantenerse en un mercado que dicta unas leyes a medida de los grandes. "El mercado, los americanos, tienen muy claro qué tipo de cine quieren que subsista y qué tipo de cine quieren que desaparezca. Desde el año 2000, las multinacionales se están cargando el sistema de distribución de las pequeñas producciones. Lo hacen elevando el número de copias para estrenar una película en muchas salas, y eso es una inflación para el cine. Los pequeños no podemos aguantar eso, no podemos salir con 400 copias porque para eso se necesita mucho dinero", lamentó ayer, y denunció que "ahora solo existen las grandes producciones dominadas por los grandes estudios, en España Antena 3 y Telecinco. Hoy, si no perteneces al mundo endogámico de la televisión, o no conoces a alguien que te meta ahí, lo tienes difícil". A Armendáriz le parece triste que el mercado mida todo en cifras. "En cine, vales tanto como la última recaudación que has hecho. Y las cifras que se dan no son justas, de las grandes producciones solo se destacan sus recaudaciones millonarias pero no se habla de lo mucho que han costado, y quizá una pequeña película haya sido más rentable".
Pero no se quedó en lo negativo: "Lo que no consiguen controlar, y no van a poder controlar, es Internet. Eso se les escapó de las manos por su propia avaricia, y ahí está la puerta para la gente que empieza a hacer cine. Lo mismo que hacíamos en mis tiempos con la cooperativa (la que montó en los años 70 con amigos para empezar a rodar cortos), se puede hacer ahora. Con una cámara digital y una buena historia, puedes llegar al público a través del crowdfunding y de Internet. Por ahí hay que caminar", propone Armendáriz, un autodidacta que asegura que a hacer cine se aprende "haciendo y equivocándose", y para quien lo fundamental es "el punto de vista". "Es lo que diferencia a un cineasta, su posicionamiento ético, estético y narrativo. Lo que te hace colocar la cámara en el modo correcto".
El director navarro, que mientras escribe imparte cursos de interpretación y dirección en universidades -"una forma de subsistencia"-, desveló ayer que uno de sus retos es hacer una comedia: "Es uno de mis traumas, lo he intentado, tengo por ahí esbozos de historias, y ahí sigo, ojalá pueda hacerlo algún día".