BERGARA - El músico luchó por vivir durante la hora y media en la que fue atendido por un equipo sanitario de una ambulancia de SOS Deiak. Su cuerpo ya sin vida fue trasladado al Instituto Anatómico Forense de Donostia, donde se le practicó la autopsia a quien fue guitarrista de la leyenda de RIP, grupo de Arrasate en el que solo queda vivo su hermano Txerra, batería de la formación. Jul también fue integrante de The Kagas -con Evaristo Páramos, de La Polla Records- y de Txapelpunk.
La triste pérdida del músico arrasatearra causó conmoción en el gaztetxe, que celebraba el 30º aniversario de la radio libre Txapa Irratia. La organización desalojó a alrededor de 150 personas presentes en el local asambleario en el que The Potes comenzó a tocar a las 18.15 horas, a modo de sobremesa. Eran las 19.30 horas -según los presentes- cuando se desplomó el músico.
Iñigo Herreros, de la empresa RSound, técnico de sonido y organizador del concierto, comió al lado de Jul y aún ayer se mostraba afectado. “Nadie le notamos nada extraño en la mesa ni luego. Era un hombre supertranquilo y estaba últimamente muy contento con mi trabajo, lo que era de agradecer. En un principio, todos pensamos que era un simple mareo, pero no fue así. Una pena. Teníamos muy buena relación”, lamentaba ayer en declaraciones a este diario.
La noticia corrió de boca a oído. Nadie podía dar crédito. Koldo Otamendi, del portal Musika Zuzenean, lo recuerda. “Me llamó un amigo, pasado. Me quedé blanco. Jul era lo que se dice un buen tío. En RIP era el que menos destacaba pero sus riffs eran de lo mejor de aquí. Era tan grande como humilde, discreto. Son cosas que pasan en esta puta vida”, valoraba Otamendi.
Aguayo, guitarrista de Kaotiko, también lamentaba el inesperado agur. “Éramos muy amigos. Era superbuen tío. Yo le conocía de cuando tocó en Txapelpunk. Era de los que se desvivía por hacerte sentirte bien. Era más abierto que su hermano Txerra. Muy cercano”.
El crítico musical de Diario de Noticias de Navarra, Óscar Beorlegui, también tenía palabras de recuerdo para Bolinaga. “Encargado de las guitarras de RIP; nos enseñó desde los primeros 80 que el punk local, además de letras, podía tener cuerpo musical. Presencia sonora sobre los escenarios. Corpulencia color negro total, al que también demostró tocando en los debuts de Txapelpunk y The Kagas. ¡Claro que sí!”.
MORIR TOCANDO Un seguidor de la banda fue Andoni Ruiz, exbatería de Martxoak 31 y MPB. “Destacaría de RIP su actitud punk. A mi juicio, eran más punk que Eskorbuto. Sabían dónde estaban, de dónde venían y a dónde iban. He leído la noticia y he flipado. De lo malo de esta noticia, lo positivo es que ha muerto haciendo lo que verdaderamente le gustaba, tocar sobre un escenario, además una canción de RIP”. En esta misma línea se mostraba Roberto Moso, de Zarama. “Con 115 años no me importaría morir sobre el escenario. La pena es que Jul tenía 50”, valoraba el de Santurtzi y proseguía: “Coincidí con ellos la última vez hace dos años para un documental. Me dijo que andaba muy involucrado con el gaztetxe de Arrasate. Nunca hubiera pensado, nadie, que fuera ocurrir esto. Los RIP eran muy guipuzcoanos, introvertidos, pero que cuando abrían la lata te lo daban todo. Era una gozada coincidir en los conciertos. Su muerte es una verdadera pena”.
Una de las fotos históricas de este guitarrista con RIP que más ha corrido como la pólvora por las redes sociales es obra de Jon Iraundegi, aunque pocos se la firmen como es de ley. “Yo poco puedo decir. Solo les vi una vez y media porque Mahoma (Carlos Agirreurreta, uno de los fundadores de RIP, ya fallecido), se largó harto de que algún imbécil se dedicara a tirar petardos al escenario. Eso fue en el gaztetxe de Hondarribia. La foto choriceada es de un festi de Donosti con Kortatu, Cicatriz, Basura y Odio. Su disco me parece uno de los discos imprescindibles del rock de Euskal Herria”, dispara.
El grupo The Potes agradeció al equipo y organización del gaztetxe de Bergara su “comportamiento que fue realmente ejemplar en todo momento. Gracias también a todos nuestros amigos que se quedaron allí para ofrecernos su apoyo como siempre y una vez más. Nuestro más sentido pésame a toda la familia, amigos y sobre todo a Txus. Adiós compañero, ha sido un auténtico honor haberte conocido”, concluyeron agradecidos.